
Cartas
Lunes 08 de Febrero de 2010
¿Trabajar con los mejores?
Señor Director:
Flaco favor le hace al Presidente electo y a su proyecto y estilo de gobierno que desea implementar en Chile, el columnista de este diario señor Gonzalo Rojas, en su publicación del miércoles pasado.
En efecto, de las palabras de Rojas se desprende en forma clara y precisa su pensamiento conservador excluyente, no integrador y poco tolerante, el cual representa a una parte no menor de la derecha que forma parte de la Coalición por el Cambio, cuyo pensamiento es muy disímil y opuesto a lo expresado, dicho y querido para el país por el Presidente electo, pues éste habla de integración, unidad y gobernar con los mejores, más allá de su pensamiento.
De lo expuesto por Rojas, queda en evidencia que éste es un teórico que jamás ha creado o desarrollado un proyecto empresarial o generado fuentes de trabajo o riqueza, pues si así fuera habría entendido que para sacar adelante un proyecto de esta naturaleza es necesario trabajar y buscar a los mejores, con independencia de lo que piensan o del culto que profesan, y así se trabaja buscando a los mejores gerentes, al mejor tributarista, ambientalista o litigante si se trata de un problema judicial que resolver, siendo lo importante sacar adelante la realización del proyecto querido.
Siguiendo la lógica de razonamiento de Rojas, si nos viéramos enfrentados a un grave problema de salud que resolver, propio o familiar, no podríamos buscar al mejor médico, sin que previamente le preguntáramos qué piensa o qué culto profesa, pues si no fuera "gente como uno" podría ser poco confiable y no grato trabajar con él.
Alfredo Ugarte S.
Abogado
por:
Roberto Finat Díaz
08/02/2010 19:42
[ N° 104 ] 1/2 Unas opiniones personales y, por supuesto, muy denostables.
*
Chile, magnífico país donde la oligarquía tiene dos caras y un sicario llamado Consternación.
Chile fértil provincia donde la progresía tiene una cara centro izquierdista y otra centro derechista.
Chile donde un hombre que procede de la Progresía Izquierdista ha sido elegido por los votos de un 52% y se dispone a gobernar con la Progresía de Derecha.
Y, pese a lo presagioso de nuestra ya abyecta situación de prisioneros de oligarcas crueles, materialistas y eficientes, Chile es un país mágico. Un país que Dios lo ha cuidado como se cuida al hijo inepto.
Y bien podría resultar que el nuevo presidente, cortando las ataduras con su amor al oro, del cual ya tiene tanto, emplee su capacidad sobre humana de instinto e intelecto y realice un gobierno que desate a los pequeños del yugo oligárquico, de la usura bancaria y del "retail", de las altísimas e injustificadas cuentas "Españolas", de la extorsión peruana, y de la extorsión boliviana, de la impostura de extremistas aprovechados que han usurpado la identidad de nuestros hermanos Mapuche.
Un presidente que lance a crear al potencial empresario del pueblo chileno, destrabando las Pymes de las trabas oligárquicas que la Concentración tan hábil le impuso, para beneficio de sus aliados tan oligárquicos como ellos mismos.
Posteado por:
Roberto Finat Díaz
08/02/2010 19:43
[ N° 106 ] 2/2
Tal vez, la gracias de Dios Todopoderoso, impulse a Sebastián Piñera a merecer las bendiciones de los pobres, las oraciones agradecidas de la clase media y todo sin hacer injusticia, solo ajuste, a los derechos que tienen "los que más tienen".
Tal vez por bendición divina, quiera ser y sea el Hombre Providencial que haga justicia en esta tierra nuestra, devenida Patria de la Inequidad y la Injusticia.
Y el que aherroje al malo y libere de las rejas y candados al Pueblo en todo su conjunto.
Uno que revierta el desorden e involución culturales, y los chilenos de toda edad puedan y podamos alcanzar una moderna y útil e iluminadora educación.
Aquel que dé Remedio a la Salud del Pueblo.
El que destrabe el obstáculo que es para el pobre el Transantiago.
Tal vez, tal vez nuestras montañas Baluarte que nos dio el Señor, y nuestras estrellas australes, ojos celestes en cielo límpido cual no hay, y el mar bravío, y el aire nuestro y nuestra tierra y nuestro fuego ancestral y hogareños presencien el advenimiento por milagro de Dios, de un Gran Estadista, de un Mandatario Humilde, de un Sabio Realizador del Poder.
Yo, chileno mínimo así se lo pido a Dios, Amén.
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