
El canciller argentino Héctor Timerman inauguró con una polémica su relación con Chile en 2011. Esto porque ayer planteó a una radio trasandina su posición sobre la situación de Galvarino Apablaza, el ex líder del FPMR requerido por el crimen de Jaime Guzmán y al que su gobierno dio asilo. "No está probado que sea terrorista. No fue juzgado, esa es la razón", dijo.
Las reacciones fueron inmediatas. Por ejemplo, el senador UDI Andrés Chadwick ironizó con el tema: "Como el canciller argentino ha sido brillante en la extradición, tengo que decirle que Apablaza no es un terrorista, sino una monja carmelita", afirmó.
En la tarde, Timerman llamó al canciller Alfredo Moreno para decirle que lamentaba haberse referido al tema. En Cancillería afirmaron que si bien el ministro le agradeció el llamado, le recalcó que no se había probado que Apablaza fuera terrorista porque no había sido posible juzgarlo tras la negativa a la extradición.
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