AUSENCIA DE JUSTICIA E IMPUNIDAD DEL VANDALISMO

Hernán Felipe Errázuriz
Sábado 24 de Septiembre de 2011

Es impactante que ninguno de quienes aprovecharon las recientes marchas, tomas y huelgas ilegales para delinquir haya sido todavía condenado. Centenares fueron puestos a disposición de la justicia por agresiones a carabineros, incendios y destrucción de propiedad pública y privada, incluidos 150 vehículos policiales inutilizados. Más de 600 carabineros resultaron heridos, muchos de gravedad. Todos los detenidos quedaron libres, salvo dos, hasta donde se sabe; uno, por haberle lanzado una bomba a un carabinero, y el segundo, por causar lesiones graves a otro policía, y al que una semana después de haber comparecido y ser liberado por el juez la Corte le revocó la libertad .
En contraste, en Gran Bretaña, protestas menores a las chilenas han significado mil 350 vándalos puestos a disposición de los tribunales, 157 condenados, cerca de 800 detenidos y 327 sujetos a trabajos comunitarios y bajo fianza. Los jueces funcionaron en horarios extraordinarios y fueron reforzados por magistrados retirados. El gobierno dispuso de fondos especiales para programas de rehabilitación. Gobernantes, opositores y la justicia apoyaron a la policía, reclamaron sanciones ejemplares y siguen atentamente el curso de los procesos con información centralizada y confiable. También hubo de lamentar la muerte de un joven inocente por la policía.
Habría que considerar las consecuencias de la frustración de los carabineros maltratados, expuestos a graves riesgos y que ven deteriorada su autoridad cuando detienen criminales que no reciben sanción. Hay más policías investigados -algunos detenidos- que delincuentes formalizados por haberlos agredido. Otro doble estándar para la justicia de los uniformados.
Cabría preguntarse cuáles son las fallas del sistema que permiten la impunidad del vandalismo y burlarse de la ley para volver a cometer fechorías. Desde luego, es un secreto a voces la permisividad de los jueces de garantía, en algunos casos facilitada por las dificultades de la policía para acompañar pruebas de agresores encapuchados. Otra causa es la falta de información sistemática -sea por ineptitud o bien por el vértigo de la reserva- de los procesos por desórdenes, que dificulta políticas públicas e impide que la policía, los fiscales y la justicia rindan cuenta de su efectividad a la ciudadanía.
Además, nuestro sistema penitenciario está colapsado y sin programas de rehabilitación para disminuir las reincidencias en estos delitos. No sólo se trata de aplicar el peso de la ley y encerrar a los delincuentes, sino además de formular estrategias para prevenir y disminuir su recurrencia por vías ejemplarizadoras y educativas.
Lo concreto es que las instituciones están operando en favor de los vándalos, y no se conoce un plan para corregir las fallas que amagan la seguridad ciudadana y debilitan a la justicia y a Carabineros.

Algunos Comentarios publicados

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catalina alejandra gómez varas
24/09/2011 08:52
[ N° 1 ] Admirablemente atinadas las consideraciones del columnista.
No faltarán los habituales comentarios descalificando el señor Errázuriz por "facho".
¿Alguien me puede explicar un detalle que no entiendo en este jueguito? Expongo: el porcentaje de comunistas en este lindo país es una minoría verdaderamente despreciable, si no me equivoco, algo inferior al 5 %. Sin embargo, en estos tiempos, cualquier manifestación de opinión ciudadana que no concuerde con la ideología de ese execrable grupo, es inmediatamente tildada de "facista" por decir lo menos.
¿Significa esto que el 95 % de los chilenos somos "fachos"?

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Eduardo Bastias Herrera
24/09/2011 09:00
[ N° 2 ] Todos reconocemos la justicia y lo pertinente que son los reclamos de los estudiantes, que nos lanzan en el rostro la inmoralidad de un país donde un 20% dela población vive en la riqueza, y el resto debe compartir las migajas. Un país donde las grandes empresas y los detentadores del poder político y social son una misma clase, todos coludidos para exprimir a la gente.
También todos reconocemos, como el articulista, la ineptitud de un sistema incapaz de controlar el orden público, al tiempo de permitir la libre y democrática expresión de los ciudadanos. Es una gran falencia. Debe ser posible en Chile que las cosas cambien en pro de una mayor justicia social, sin que el lumpen se aproveche de las circunstancias para delinquir. Es una responsabilidad de los llamados por la Ley a cuidar del orden.
También resulta lamentable y preocupante que el jefe máximo policial deba dejar el cargo debido a actos de corrupción, y que sus pares lo respalden públicamente. Ello ha reducido el valor tanto de la policía como del Gobierno, todos ya bastante devaluados.

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Claudio Guzman Merino
24/09/2011 09:07
[ N° 3 ] Señor Errázuriz:
No opinaré de la autoridad moral para hablar de impunidad, pero al parecer no hay de qué preocuparse. Ya no aparece el ministro del interior en pantalla sino la de su asesor el ex fiscal Peña, lo que debe significar que todo está muy bien, como él solía decir, que la delincuencia está en retroceso.
Y no he visto acusaciones de corrupción al poder judicial por parte de los querellantes, por lo que todo debe estar en regla.
Cordialmente


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pepo danmar
24/09/2011 09:08
[ N° 4 ] La pregunta que formula el columnista:
"...Cabría preguntarse cuáles son las fallas del sistema que permiten la impunidad del vandalismo y burlarse de la ley para volver a cometer fechorías...".
No hay fallas en el sistema, señor Errázuriz. Esto, para usar las palabras del Chapulín Colorado, está "fríamente calculado". La Reforma Procesal Penal fue cuidadosamente planificada para producir precisamente el efecto que usted considera una falla. Con el propósito, conjuntamente con varias otras modificaciones legislativas, de llegar, a mediano o largo plazo, a lo que el señor Frei ya intuye pero echándole la culpa al grupo equivocado: ingobernabilidad, anarquía y resentimiento ciudadano, el perfecto caldo de cultivo para el zarpazo totalitario de izquierda.
Los comunistas saben esperar con disciplina y paciencia. La Bachelet les seguirá pavimentando el camino en el 2014 y no sería extraño la llegada de Juana de Arco, perdón, Camila, al sillón de Toesca en 2018.
Ahora les incordia Hinzpeter a algunos. Me pregunto cómo nos sentiremos entonces con Gajardo en el mismo cargo.

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josé manuel rodríguez angulo
24/09/2011 09:23
[ N° 5 ] ¿Y a Labbé, quién lo para?

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Leopold Ruber Kopalova
24/09/2011 09:43
[ N° 6 ] ¿En serio no sabe donde esta la falla,o es una pregunta, para no corregirla?

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catalina alejandra gómez varas
24/09/2011 09:48
[ N° 7 ] Señor Rodríguez, posteo N° 5.
El señor Labbé está haciendo lo correcto. El "carrete" de los últimos cuatro meses ha sido entretenido. Pero los estudiantes deben volver a la realidad. ¿Estamos o no estamos en un estado de derecho?
¿O le gustaría a usted que gobernaran los encapuchados?