domingo, 7 de noviembre de 2010

Las experiencias extremas del hombre que aparece enfrentado a Bielsa



Guillermo Muñoz
El Mercurio

Un ambiente tenso rodeó a los partidarios de Jorge Segovia Bonet cuando, el miércoles en la noche, Marcelo Bielsa terminó la conferencia de prensa en que ratificó que si Harold Mayne-Nicholls abandonaba la ANFP, él haría lo mismo con la dirección técnica nacional.

El grupo estaba reunido en el Hotel Intercontinental y, según relatan algunos de los presentes, se temió que la presión pública que significaba la aparición del entrenador rosarino hiciese que Segovia reconsiderase su decisión, pensando particularmente en que éste, según relatan, tuvo un revés cardíaco a principios de año.

El español, sin embargo, los reunió y les contó algunos episodios de su vida privada. Después del relato, el presidente electo de la ANFP comentó que, de lejos, la situación que estaba enfrentando en ese momento no era la más difícil que había tenido que soportar. Y lo más importante: que bajo ningún motivo bajaría su candidatura.

Según comentan en el entorno de Segovia, el episodio más duro tendría que ver con una amenaza de muerte que le hizo la organización violentista ETA, en España, y que lo obligó a vivir bajo extremo cuidado y vigilancia durante largo tiempo.

Nadie quería enfrentar a Bielsa

Cinco días se demoró Jorge Segovia en responder que sí aceptaba el desafío de enfrentar a Harold Mayne-Nicholls en las elecciones de la ANFP, afirman sus cercanos. Se lo había pedido Antonio Bloise, presidente de Everton, quien originalmente apareció como el candidato elegido por la oposición.

Pero el dirigente viñamarino desechó la posibilidad porque, como dijo a sus cercanos, no estaba dispuesto a asumir el costo de aparecer como el responsable de una eventual partida de Marcelo Bielsa.

Segovia, sin embargo, no tenía ese problema y por eso Bloise lo ungió a él para que asumiese la tarea. El empresario de 48 años -casado, católico, con 4 hijos- pidió cinco días para dar una respuesta, conversó con su familia, y el 24 de octubre aceptó el desafío colocando como única condición que fuera él quien eligiera los nombres de los dirigentes que lo acompañarían en la lista para presidir la ANFP.

En su entorno afirman que el español evaluó los costos que significaba enfrentarse a la alta popularidad de Mayne-Nicholls y de Bielsa, pero que no les teme a las decisiones extremas y que le gustan los desafíos difíciles. "Tiene una dermis muy dura", comentan.

Por lo mismo, ya había barajado la posibilidad de que la opinión pública se volcara contra él y lo culpara de la partida de Bielsa, uno de los directores técnicos más populares o "el más exitoso de los últimos 40 años", como se le ha tildado entre sus partidarios. También que lo acusarían de "derrocar" a Mayne-Nicholls, en una gestión evaluada públicamente como una de las mejores.

Aun así, comentan que el empresario no esperaba que con la elección se reflotaran públicamente temas como un eventual enfrentamiento que tuvo con su padre o denuncias sobre "malas prácticas" en el contrato del jugador Raúl Estévez.

Negocios versus arte

Las óperas del italiano Giuseppe Verdi son las piezas musicales favoritas que Segovia escucha en sus tiempos libres. De hecho, no sólo el fútbol y la educación copan su tiempo de trabajo: también es director del Teatro Municipal.

Su interés por este ámbito tuvo su minuto de máximo reflejo cuando cursó Historia del Arte en la Universidad Complutense de Madrid, vocación que debió abandonar parcialmente para dedicarse a los negocios.

Mientras estudiaba, su padre sufrió un ataque al corazón -del cuál se recuperó más tarde-, y Jorge Segovia debió hacerse cargo de los colegios San Estanislao de Kotska (SEK), que pertenecían a la familia.

Desde entonces, el arte y la música quedaron en un segundo plano en la vida de Segovia.

Abandona España

Hace sólo tres semanas y justo antes de que le propusiesen la candidatura para presidir la ANFP, Segovia estuvo en España, donde visitó a su padre, Felipe Segovia, quien nuevamente está delicado de salud, según dicen cercanos al dirigente de Unión Española.

La relación entre ambos es un tema que ha generado controversia pública. Un artículo del diario español El Mundo señaló que entre ambos se generó una fuerte rivalidad por el control de la sigla SEK y que hubo demandas de por medio. Jorge Segovia y su entorno en Chile, sin embargo, siempre han negado este conflicto.

Lo cierto es que mientras el mayor del clan se ha concentrado en la labor educacional en la península ibérica, Jorge Segovia se preocupa de las que se han establecido en otros 11 países.

Fue él mismo quien decidió internacionalizar los establecimientos educacionales SEK, a comienzos de los años 80, proyecto que tuvo como primer laboratorio a Chile.

Pese a la fecha de inicio de este proyecto, Segovia recién decidió radicarse en este país en 1990, fecha que coincide con la creación de la primera universidad SEK, también en Chile.

En su entorno destacan que la determinación de internacionalizar la marca fue arriesgada, pero que, pese a experiencias adversas como la ocurrida en Argentina, resultó ser un acierto.

Experiencia en Estados Unidos

Los buenos resultados que los colegios y la universidad tuvieron en Chile hicieron que Segovia buscara horizontes más amplios, al punto que decidió ir por el mercado más grande del mundo: Estados Unidos.

Se radicó en el estado de Florida, donde creó un nuevo colegio, pero, según él mismo ha contado, los primeros años de resultados positivos comenzaron a complicarse tras el atentado a las Torres Gemelas del año 2001.

"Los extranjeros empezamos a tener muchos problemas, a ver malas caras. Eran detalles: no me querían renovar la licencia de conducir o cada vez que entraba (a Estados Unidos) me preguntaban a qué venía, teniendo visa de trabajo", afirmó el año pasado a "El Mercurio".

Luego de la experiencia, decidió volver a Chile.

Incursión en el fútbol

Lejos de desacelerar su ritmo en los negocios después de su revés en Norteamérica, Segovia buscó nuevos campos donde invertir el dinero recaudado por la venta de un colegio en Segovia, y es en ese momento que se da la posibilidad de entrar en el fútbol.

Conversó con Salvador Calera, ex presidente de Unión Española, supo del estado de quiebra en que se encontraba el club y mostró inmediatamente su interés.

En 2008 decidió adquirir el club por $2.500 millones y hoy es propietario del 99,9% de la institución a través de SEK.

Sus partidarios recalcan que durante su gestión, Segovia ha sido capaz de sanear los estados financieros, mejorar el rendimiento del equipo y remodelar el Estadio Santa Laura.

Se le atribuye una personalidad seria, poco festiva, que mantiene una buena relación con Iván Zamorano -a quien le habría pedido algunos consejos futbolísticos- y cercanía con el ex seleccionado nacional José Luis Sierra.

Sin embargo, su período en Unión Española le ha traído algunas experiencias adversas, como la primera campaña de Unión Española bajo su mandato. También se le ha acusado de establecer un contrato "doble" -a través de un acuerdo sobre derecho de imagen con el Colegio Internacional SEK- con el jugador Raúl Estévez para rebajar obligaciones tributarias y previsionales.

Los cercanos a Segovia afirman que esto último es parte de una campaña destemplada contra el presidente hispano. También afirman que no hay ningún impedimento reglamentario para que asuma en la ANFP.

Respecto a su nacionalidad, además, explican que en un corto plazo se convertirá en ciudadano chileno.

Obstáculos que, insisten en su entorno, no mellan en nada la voluntad de Segovia para continuar con los planes que se ha trazado, las características que llevaron a Bloise a elegirlo para desafiar a Mayne-Nicholls.

Según comentan en su entorno, el episodio más duro tendría que ver con una amenaza de muerte que le hizo la organización violentista ETA en España y que lo obligó a vivir bajo extremo cuidado durante largo tiempo.


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