viernes, 4 de enero de 2013

MI DECISIÓN DE VOTO



DEL BLOG DE HERMÓGENES

miércoles, 2 de enero de 2013
Mi Decisión de Voto

Hoy he recibido un correo electrónico del coronel (r) Lisandro Contreras Radic, señalando que no votará por Andrés Allamand y exponiendo como fundamento que el abogado de extremistas de izquierda, Nelson Caucoto, ha declarado que fue a ver a aquél cuando era Ministro de Defensa, para pedirle su ayuda con el fin de identificar a quienes mataron a Víctor Jara, y que Allamand no sólo lo trató muy bien, sino que se comprometió a "monitorear personalmente" la solicitud de información a las Fuerzas Armadas sobre esa muerte, para apoyar el juzgamiento del caso.

El coronel (r) Contreras Radic tiene razón: lo que una autoridad de un gobierno, no ya de centroderecha, sino mínimamente respetuoso del estado de derecho, debió haber contestado al abogado del extremismo, debería haber sido que la muerte de Víctor Jara ocurrió en 1973, por cuyo motivo ella, como hecho penal, estaba no sólo prescrita, sino también cubierta por la ley de amnistía; y que pretender indagar acerca de esos hechos contravenía una de las bases del mencionado estado de derecho, que es la certidumbre jurídica, aparte de contravenir todo propósito de reconciliación entre los chilenos. Pues no puede ser que indefinidamente puedan eternizarse en el tiempo y revivirse situaciones del pasado y querellas internas que ya han quedado consolidadas.

En ese sentido Allamand, como ministro, fue más allá incluso que su superior, el Presidente de la República, quien, como candidato, se comprometió a velar por que los juicios contra uniformados (r) tuvieran pronto término, en lugar de eternizartse, y que se aplicaran la prescripción y el estado de derecho. Sabemos que Pïñera no cumplió esa promesa y que, al contrario, ha sido proactivo en contravenirla, pues su Ministerio del Interior ha acelerado la presentación de querellas contra uniformados (r) por hechos prescritos, amnistiados y aun amparados por la cosa juzgada.

Esa conducta explica en parte su bajo apoyo en las encuestas de opinión, pues la gente castiga a los políticos, de cualquier sector que sean, cuando engañan a las personas para conseguir sus votos, aunque la gente no esté de acuerdo con las personas engañadas. Ese subterfugio demagógico es castigado per se.

Ya Allamand antes se había enajenado la adhesión de quienes apoyamos a los uniformados cuando exoneró a todos los oficiales (r) que asesoraban al Ministerio de Defensa por la causal de haber alguna vez trabajado en los servicios de inteligencia del Gobierno Militar, aunque no hubieran sufrido procesamientos ni condenas. Y fue más allá, pues exoneró a un asesor, que era general (r), y que ni siquiera había trabajado en los servicios de inteligencia. Como no se le dio explicación por su cese, sólo cupo sospechar que el mismo se había fundado en que es yerno de un ex Director de la DINA. Seguramente hay pocos precedentes en nuestra administración pública de la exoneración de un funcionario por ser yerno de alguien.

Como yo he hecho una causa propia de la defensa de los uniformados contra las arbitrariedades e ilegalidades que la clase política ha cometido o tolerado en su perjuicio, ya tenía muy claro que en caso alguno iba a sufragar por Andrés Allamand, o personas de su predicamento en estos temas, para ningún cargo de elección popular. Pero estoy considerando la posibilidad de añadir un requisito más para favorecer con mi sufragio a futuros candidatos. No lo tengo todavía decidido, pero estoy pensando seriamente sólo votar por quienes en forma explícita manifiesten su apoyo a los presos políticos uniformados y su rechazo a la forma arbitraria e ilegal en que han sido y están siendo procesados, encarcelados y condenados.
Publicado por Hermógenes Pérez de Arce

No hay comentarios: