VIVENCIA EN UN ORGANISMO DE RECLUSION PREVENTIVA PARA MILITARES CECOM (Reg. Policía Militar de Peñalolén)

Santiago, Septiembre de 2009 (Mes de la Patria y Glorias del Ejercito)

Soy un ex – soldado de mi querido y glorioso Ejercito de Chile, orgulloso de haber participado en darle libertad a mi país, debido a que un grupo de ex – camaradas de armas hoy se encuentran privados de libertad los fui a visitar, especialmente en días previos al 11 de Septiembre, al respecto me permito manifestar mi mas profundo malestar, dolor e impotencia por el trato indigno que están recibiendo sus familiares, me pude percatar que las esposas, hijos, nietos, padres y familiares en general, los humillan con las revisiones y chequeos con detectores de metales que le efectúan los soldados (hombres y mujeres), en un momento pensé que estábamos en una Cárcel de Alta Seguridad entre peligrosos hampones, faltando solamente se timbrara las manos de las visitas. En el caso particular, a Dios gracia estoy en libertad, pero veo a esos viejos soldados, enfermos, cuestionados, procesados, con escasos recursos económicos alguno de ellos, y debido a esta situación pierden su fuente laboral de inmediato, con una tremenda carga emocional, veo como un oficial con el grado de Capitán, Cabos de Reserva y soldados se burlan de estas situaciones, los tratan como unos verdaderos delincuentes ó enemigos, ellos no saben ó no conocen que esos viejos soldados recluidos les dieron la libertad a este País, que estos participaron en una gesta heroica, que la historia se encargara de ellos, hoy ninguno de ellos esta juzgado, muchos saldrán absueltos, les correspondió un duro vivir, hay muchos que murieron en actos heroicos, pero el día de mañana serán victoriosos, me gustaría que nuestro Comandante en Jefe a través del señor General de la Guarnición, les pudiera informar a mis camaradas que si ellos dispusieron de estas revisiones a los familiares y ex – colegas, tales como; abrir las bebidas gaseosas, las colonias de adultos y niños, los maquillajes de las mujeres, en el caso personal presencie cuando abrieron una caja con cremas a una dama, las mamaderas de las guaguas las huelen sin importar que las contaminan, las carteras de las damas son vaciadas por completo sin importar la privacidad de estas, retiran las llaves de vehículos y casas, los corta uñas. No me explico el criterio usado en estos actos de humillación, ya que ellos mantienen enseres de cocina,
tales como; cuchillos, destapadores, elementos cortantes y cualquier otro elemento como para atentar contra su persona (si es que ese fue la motivación para tal procedimiento), yo se que ellos se presentan voluntarios a cumplir sus reclusiones, no los dejan usar teléfono celular, televisores en sus piezas, radios, etc.
Personalmente he visitado a compatriotas, recluidos de otras Instituciones, y por Dios que están lejos de la humillación que reciben estos ex – soldados del Ejercito de Chile, al parecer Carabineros, Aviación y la Marina, saben reconocer y valorar a su personal, no los tratan como una lacra social, especialmente por estos jóvenes soldados de hoy, que al parecer no saben nada de historia o les han contado cosas que no fueron parte de la realidad, hasta he pensado que nuevamente estamos rodeados ó infiltrados por algunos políticos que solamente quieren venganza o beneficiarse electoralmente de nuestros ex – soldados.
Pido con mucho respeto que se valore a esos viejos soldados servidores de la Patria, denles la oportunidad de mitigar en parte sus penas con sus familiares y amigos, no permita que sean vejados, solicito se autorice que se comuniquen, aunque sea por teléfono, hoy tienen 2 llamadas diarias, una que reciben y otra que ellos pueden hacer hacia el exterior del Recinto
Finalmente quisiera traer unas citas que considero no podemos dejar de recordar.
La Honorable Junta de Gobierno dijo textual en documento oficial dirigido a todos los miembros del Ejercito, Armada, Fuerza Aérea y Carabineros de Chile: “Los padres, las esposas, los hermanos, los hijos y las novias de nuestros combatientes, que en forma abnegada y cariñosa los alentaron e impulsaron al cumplimiento de su deber patriótico, reciban también el homenaje que nosotros les rendimos”.

Y como pensamiento que guía nuestras vidas: “Cuando la Patria esta en peligro, se ruega a Dios y se recurre al Soldado. Cuando el peligro ha pasado, Dios es olvidado y el Soldado es repudiado…”.