Bachelet rechaza palabras “ofensivas” desde Perú

La Nación

Presidenta pidió respeto y responsabilidad luego de las declaraciones del Presidente Alan García sobre el caso del supuesto espía.

Ministro Vidal se alinea con Bachelet

Perú: “No es una acusación contra Chile” o Bachelet

Canciller: No nos tocan dichos despectivos de Perú

Justicia militar peruana abrió proceso contra Ariza

La Presidenta Michelle Bachelet se puso este martes, poco después de regresar al país, a la cabeza de la defensa del Gobierno ante los embates desde Perú por el caso del peruano detenido en Lima como supuesto espía al servicio de Chile.

“Las expresiones, que yo llamaría ofensivas y altisonantes, que hemos conocidos ayer, en nada contribuyen a la cooperación e integración que debe animarnos entre países vecinos”, dijo en su primera actividad en terreno luego de volver en la mañana de su gira por Asia e Italia.

En la última jornada, en Lima, el Presidente de Perú, Alan García, catalogó el caso como un “acto repulsivo” y tildó a Chile como una “republiqueta” en un discurso al término de una reunión del Consejo de Seguridad de ese país.

La Mandataria estimó que “es el momento, de que si en verdad queremos trabajar por el bienestar de nuestros pueblos, lo que debe primar por sobre toda las cosas es el respeto, sobre cualquier otra consideración, así como las responsabilidades de las autoridades”.

"Yo quiero decirlo con toda energía, todos ustedes saben que vengo llegando de una gira por distintos países, y siento un tremendo orgullo de ser la Presidenta de un país que se ha sabido ganar el merecido respeto y un lugar y un prestigio a nivel internacional y yo quiero llamar a mantener el respeto que se requiere en la relación entre los países", agregó.

Se trata de la primera declaración de Bachelet luego de la reunión con su Consejo de Gabinete, primero, y con el Ministro de Exteriores, Mariano Fernández, en que, entre otras materias, se analizó el impasse con Perú.

Hoy, antes de las palabras de la jefa de Estado, fue el Canciller Fernández el que apuntó a lo que denominó como “sugerencias despectivas". Enfatizó que éstas "no nos tocan” e insistió en que es en Perúen donde deben resolver la veracidad de la información.

La Presidenta Bachelet realizó estas declaraciones en el marco de la inauguración del nuevo Centro de Control de Área de Santiago y colocación de la primera piedra de la Escuela Técnica Aeronáutica de la Dirección General de Aeronáutica Civil, en Pudahuel.


El ministro de Defensa, Francisco Vidal, declinó referirse al impasse diplomático generado por Perú, tras el supuesto espionaje que habría realizado un militar de ese país a favor de Chile y que motivaron que el mandatario Alan García a la nación, afirmando que es la Presidenta Michelle Bachelet y la Cancillería, quienes tienen la voz en este tema.

“Un ministro no interpela al Presidente de otro país. La Presidenta de la República, ustedes la escucharon, yo creo que interpreta el sentimiento, el corazón y el cerebro del 100% de las chilenas y chilenos”, indicó el secretario de Estado.

Vidal formuló estas declaraciones tras participar en la inauguración del nuevo Centro de Control de Área de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC).

También y en relación al tema y a los comentarios sobre la supuesta carrera armamentista de Chile como acusa el Perú, señaló que pronto se dará a conocer a la opinión pública nacional e internacional del tercer tomo del Libro de la Defensa.

“Esto va a ocurrir en La Moneda, calculamos no más allá de un mes, y ese libro demuestra, con absoluta transparencia, sin estridencia alguna, con sobriedad y rigurosidad, que Chile no tiene, no ha vivido, ni vive una carrera armamentista. Cada chileno podrá comprobar al leer ese texto en la parte pertinente, que lo que han hecho las Fuerzas Armadas de Chile del ’90 a la fecha ha sido una renovación de su material”. Agregó que “es la demostración más rigurosa, objetiva, medible, de que Chile no está en carrera armamentista y que cualquier acusación de ese tipo no se sostiene con la respuesta que vamos a dar como siempre Chile la ha dado: directa, sobria, prudente, franca y rigurosa. Eso es lo que les quería informar”.

El ministro de Relaciones Exteriores de Perú, José García Belaunde, dijo este martes la denuncia sobre el supuesto caso de espionaje que ese país atribuyó a Santiago “no es una acusación contra Chile” o la Presidenta Michelle Bachelet.

“No es una acusación contra Chile, no es una acusación contra la Presidenta de Chile, el Gabinete, los ministros, es una acusación contra aquellas personas que todavía en esta época siguen practicando estos hechos delictivos”, dijo la autoridad.

Respecto de los declaración del Presidente Alan García estimó que “ha establecido exactamente la posición del gobierno en que este es un acto de traición a la patria, ominoso, que de acuerdo a los actos internacionales, el espionaje es una actitud hostil, inamistosa”.

El ministro, en declaraciones a Radioprogramas, reiteró que “el presidente de la República ha señalado que pondrá a disposición del Gobierno chileno toda la documentación del caso para que no duden sobre la veracidad de eso”.

García Belaunde, que en otra entrevista dijo que cuentan con las direcciones IP de los computadores en Santiago, reiteró que van “a pedir a Interpol que confirme la no manipulación de esta documentación”.

El caso estalló el jueves cuando se denunció que el suboficial de la Fuerza Aérea del Perú (FAP) Víctor Ariza Mendoza, quien trabajó en la embajada peruana en Santiago, actuaba como espía chileno lo que cual es negado de manera enfática por Chile.

El ministro de Relaciones Exteriores, Mariano Fernández, se reunió esta mañana con la Presidenta Michelle Bachelet, luego que la Mandataria llegara temprano al país desde Roma, en donde ayer estuvo presente en la cumbre de la FAO, y tras encabezar un Consejo de Gabinete.

El canciller aclaró a la prensa, tras la reunión en la cual le entregó a la Mandataria los últimos detalles del conflicto por el supuesto espionaje, que el Gobierno chileno no quiere bajarle el perfil al tema y sostuvo que “sugerencias despectivas no nos tocan”, refiriéndose a las declaraciones hechas ayer por el Presidente peruano Alan García, que catalogó el caso como un “acto repulsivo” y tildó a Chile como una “republiqueta”.

“Esta es una gran república de la cual estamos todos orgullosos, un país integrado, unido, con una democracia irreprochable, con leyes exigentes en materia democrática, por lo tanto todas esas cuestiones francamente al país no le llega. De tal manera que no le bajamos el perfil a nada, si no que no nos hacemos cargo de cuestiones subalternas”.

Fernández agregó que “nunca procedemos a insultos o a sugerencias que sean despectivas o insidiosas. Las cosas las llamamos por su nombre. Lo hemos dicho en reiteradas oportunidades, este es un Gobierno que representa una democracia estable, seria, bien organizada, sus instituciones no se dedican al espionaje ni a ninguna otra actividad reñida con la legalidad y no aceptamos de ningún país y de ninguna persona imputaciones acerca de cosas de este tipo”.

El Tribunal Supremo Militar Policial de Perú abrió ayer un proceso por traición a la patria contra el suboficial de la Fuerza Aérea de ese país, Víctor Ariza, detenido por presunto espionaje a favor de Chile, después de que el fuero común iniciase otro proceso por el mismo delito.

El presidente del tribunal castrense, contraalmirante Carlos Meza Angosto, explicó que fue designado un juez de la Fuerza Aérea Peruana para que reciba las pruebas y las declaraciones de los testigos.

La denuncia por traición a la patria, delito que es sancionado en el fuero militar con entre 20 a 35 años de prisión, es formulada por un fiscal de la FAP ante el juez de la misma institución, que es el encargado de tomar las declaraciones, y en un plazo de 90 días debería emitir un informe sobre el proceso.

A continuación, el informe pasa al Consejo de Guerra de la FAP, que tienen 60 días para pronunciar la sentencia.

“Finalmente, esa sentencia sería revisada o apelada ante la sala de revisión del Tribunal Supremo Militar Policial”, agregó.

Meza justificó la apertura del juicio en el fuero militar porque “es mucho más drástico y mucho más rápido”, y porque todos los casos previos por este delito han sido procesados en este fuero.

Agregó que ambos fueros pueden avanzar en forma paralela en sus respectivos procesos, pero ninguno podría pronunciar sentencia hasta que el Tribunal Constitucional emita un fallo sobre cuál tiene la competencia. A juicio de Meza, la justicia civil debe inhibirse de actuar en este caso.