PROCESO AL EX PRESIDENTE PERUANO.

COMENTARIO:
HE AQUI UN CASO DE PERSECUCIÓN POLÍTICA EN CONTRA DE UN GOBERNANTE QUE COMBATIÓ AL TERRORISMO EN SU PAÍS. SE PRESENTA LA PARADOJA, DE QUE LOS QUE NEUTRALIZAN Y COMBATEN EL TERRORISMO SON ENJUICIADOS POR LA INJUSTA JUSTICIA DE LOS HOMBRES, SIN EMBARGO LOS TERRORISTAS SE PASEAN LIBRES Y EN TOTAL IMPUNIDAD SIN CARGOS Y ALGUNOS MAS OSADOS POSTULAN A CARGOS DE GOBIERNO O SE CONSTITUYEN EN AUTORIDADES INTOCABLES, LOS CUALES SON APOYADOS SIN DILACIÓN POR LOS GOBIERNOS IZQUIERDISTAS COMPLICES DEL CONTINENTE LATINOAMERICANO. PARA QUE SEGUIR, SI BASTA ENTERARSE DE TODOS LOS MILITARES Y FUERZAS DE ORDEN QUE ESTAN DETENIDOS Y CONDENADOS POR COMBATIR DERECHAMENTE LA SUBVERSIÓN Y EL TERRORISMO EN PAISES COMO CHILE, ARGENTINA, URUGUAY Y AHORA PERÚ. ALGO ANDA MAL EN LA JUSTICIA.
RUS.

El Mercurio.

Proceso al ex Presidente peruano:
Suprema ratifica la sentencia de 25 años de prisión a Fujimori y abogado defensor denuncia juicio político

Fue juzgado como autor intelectual de dos masacres cometidas durante su gobierno: los crímenes de Barrios Altos y de la Universidad de La Cantuta.


El ex Presidente peruano Alberto Fujimori deberá cumplir la condena de 25 años de prisión como autor mediato de los delitos de homicidio calificado, asesinato y lesiones graves que fue dictada el pasado 7 de abril y ratificada ayer unánimemente por la Corte Suprema de Justicia de Perú.

Esto significa que el ex Mandatario, de 71 años de edad, estará preso hasta febrero de 2032. Para esa fecha, si está vivo, tendrá 93 años.

Sólo cumplidos 18 años de cárcel -es decir, en 2025- podrá reclamar beneficios carcelarios. Además, según expertos, sus delitos, al ser de lesa humanidad, no pueden ser incluidos en indultos o amnistías, consignó DPA.

El primer fallo había sido emitido por la Sala Penal Especial de la Corte Suprema, la que realizó un juicio público que se prolongó por 16 meses contra el ex Mandatario, quien gobernó Perú entre los años 1990 y 2000.



El ex gobernante fue juzgado como autor intelectual de las matanzas del barrio limeño de Barrios Altos (15 muertos en 1991) y de la Universidad de La Cantuta (10 muertos en 1992), y por el secuestro del periodista Gustavo Gorriti y el empresario Samuel Dyer.

En el caso de las matanzas, fueron perpetradas por el grupo Colina, un comando paramilitar del Ejército en el marco de la guerra que el gobierno libraba contra la guerrilla de Sendero Luminoso.

La Comisión de la Verdad, que documentó el conflicto -que produjo 70.000 muertos entre 1980 y 2000-, determinó que ninguna de las víctimas de Barrios Altos o La Cantuta tenía relación con la guerrilla, como presumían los organismos de seguridad.

El tribunal de apelación, presidido por el juez Duberly Rodríguez, ratificó igualmente que el secuestro del periodista y del empresario fue "agravado", y no simple, informó un comunicado del Poder Judicial.

El fujimorismo tenía esperanzas de que se variara la calificación del doble secuestro, pues eso le daría la posibilidad de acogerse en el futuro a los beneficios penitenciarios que no se otorgan a los condenados en la modalidad agravada.

César Nakazaki, defensor de Fujimori, tras rechazar el fallo que confirma la sentencia, señaló que no ha sido un proceso jurídico, sino "político".

"Nosotros hemos denunciado que el Poder Judicial tiene una posición ideológica en cuanto a generar la destrucción del fujimorismo, y la sentencia del tribunal va en ese camino", precisó el abogado.

Sostuvo que desde un comienzo "establecimos que no se creía en el tribunal, porque este caso no es un caso estrictamente jurídico; es político y mediático", lo citó AFP.

"Mundo al revés"

El congresista Carlos Raffo, en la primera reacción del fujimorismo, dijo que se trata de una "noticia decepcionante, que demuestra que el mundo está al revés".

Por el lado de las víctimas, Gisela Ortiz, familiar de uno de los muertos de La Cantuta, rechazó que haya sido un juicio político. "Ésta es la culminación de un proceso histórico. No fue un juicio político, sino contra un delito concreto: violaciones a los derechos humanos".

El primer ministro, Javier Velásquez Quesquén, señaló que "el gobierno respeta el fallo y el país debe acatar la decisión del Poder Judicial".

Durante el juicio, Fujimori se declaró inocente de todos los cargos que se le atribuían.

El ex Mandatario fue condenado también en tres megajuicios que le hicieron por casos de corrupción, pero las penas de prisión en esos procesos no tienen efecto práctico, puesto que en Perú las sentencias no se acumulan, sino prevalece la mayor; en este caso, los 25 años ratificados ayer.

"El Presidente que nos liberó del terrorismo es condenado. Aquí hay un ajusticiamiento político".Carlos RaffoCongresista y ex asesorde Fujimori Su paso por Chile
Veintidós meses estuvo en Chile Alberto Fujimori antes de que en septiembre de 2007 la Corte Suprema aprobara su extradición a Perú.

Casi dos años pasó viviendo en Las Condes y Chicureo, donde hizo varios amigos. Al partir, muchos lo recordaron como una persona "muy amable" y de mucho roce social, amante de las cenas y los karaokes.

"Era goloso, muy glotón. Comía de todo, le encantaba", contó en ese entonces a "El Mercurio" el dueño del restaurante peruano Mare Nostrum, Adriel Castratt.

También le gustaba cocinar, y a menudo invitaba a sus amigos de Chicureo a consumir los platos que preparaba. "Sírvase, que me quedó güenazo", solía decir, según sus antiguos vecinos.

Otro de sus hobbies era cantar, acompañado de una guitarra, que incluso luego se llevó a Perú. "Siéntese. Hoy la voy a deleitar", solía decir el ex Mandatario cada vez que aprendía un nuevo acorde de guitarra. "Era un poco desafinado, pero lo hacía con cariño", dijo en 2007 a este diario Andrea Socías, vecina de Fujimori en Chicureo.

Ferviente admirador de Los Ángeles Negros y de Los Iracundos, el ex Presidente peruano se sabía todas sus canciones. Incluso, ya en Perú, el vocalista y el guitarrista de Los Iracundos, Gianni Pivetta y Leonardo Franco, lo visitaron para su cumpleaños número 70 y cantaron con él.