OPINION: ROBO DE ARMAS EN PENAL CORDILLERA

Según reconoció Gendarmería, en el Penal Cordillera, donde la concertación encarceló como PRESOS POLITICOS a distintos ex integrantes de las Fuerzas Armadas y Carabineros, se detectó una pérdida de armamento en la sala de armas (una subametralladora, dos pistolas y un revolver, todas con sus respectivas municiones).

El trascendido dice “que el hecho es gravísimo y que existe mucha preocupación en la Institución, que se tomarán las medidas más drásticas, que el jefe del penal fue trasladado y que se informó de la situación a la Fiscalía Oriente”.

También dice: ¡QUE SE EFECTUO UN ALLANAMIENTO A TODAS LAS CELDAS! y dependencias del penal sin resultados.

Si el hecho de que se pierda armamento es algo muy grave, más grave aun es que la Institución responsable (Gendarmería), pretenda poner en duda la dignidad de las personas internas en el penal allanando las dependencias que ellos ocupan. Las personas que cumplen condenas políticas en los penales Cordillera y Puntapeuco, NO SON DELINCUENTES, ellos pertenecen a dignas familias chilenas; se formaron, crecieron y vivieron sirviendo a Chile en la rectitud de nuestras Fuerzas Armadas y Carabineros, y su desdicha radica justamente en eso, en el cumplimiento cabal de su deber.

Gendarmería sabe muy bien que todos y cada uno de los ex uniformados odiosamente encarcelados por venganza política, son personas de bien, cultos, disciplinados y de sobresaliente conducta; personas que jamás cometerían un acto que se aleje de la corrección y de las normas establecidas. Por lo tanto Gendarmería DEBE una explicación, tanto a las FF.AA. y de Orden como a las familias de los internos, por el trato indigno que les dieron, y por vulnerar la seguridad de ellos con esa pérdida de armamento.

Muy extraño resulta esto, mas aun a los pocos días de que, tanto la Iglesia Católica como el Presidente Sebastian Piñera, manifestaran su posición de conceder indultos por el bicentenario nacional a las personas recluidas que no sean un peligro para la sociedad, (donde caben todos los ex uniformados apresados políticamente por la concertación).

¿No será que con esto alguien pretenda de poner en duda la excelente norma conductual de los ex uniformados prisioneros políticos?



ALEJANDRO RUSSELL O’KUINGHTTONSS