CARTA: EL OCASO DE LA POLÍTICA

Cartas
Viernes 14 de Mayo de 2010
El ocaso de la política


Señor Director:

El nivel del debate desarrollado en el Congreso esta semana no debe extrañarnos en lo más mínimo. Desde hace un tiempo la clase política nacional, sea de la orientación que fuere, ha optado por centrar su quehacer en discusiones que reflejan su declive moral, lo que a su vez explica un descrédito público.

Basta asistir a una sesión, de cualquiera de ambas cámaras, para conocer una realidad lamentable. Nadie destaca en el hemiciclo por sus dotes oratorias ni menos por un liderazgo innato. Nuestro Parlamento no registra debates de altura, centra la discusión en la contingencia y sesiona en salones desolados donde no se percibe el más mínimo respeto entre pares.

Todo, finalmente, queda entregado al análisis de comisiones y asesores. El resultado de ello es que se votan y despachan leyes y resoluciones de pobrísima calidad, la mayoría de ellas elaboradas sin profundizar en el estudio de normativas precedentes, ni menos en la revisión de debates parlamentarios que les dieron origen.

El Congreso vive un período de decadencia evidente que se enlaza con el progresivo decaimiento de las instituciones políticas en el país. La confrontación de ideas, que históricamente lo distinguió, ha dado paso a un modelo aséptico, en donde las diferencias entre los clanes políticos son sutiles o inexistentes. Hoy sabemos más de la vida privada de nuestros prohombres que de sus planteamientos. Conocemos mejor su lado coloquial y frívolo que su sesgo intelectual y obras concretas.

Carlos Donoso Rojas