Art. del Wall Street Journal‏ (traducido)

Chile! Viva Chile! Si yo tuviera tu bandera, me gustaría que ondeara hoy desde la azotea de mi edificio, y ver a mis vecinos de Nueva York sonreír, inclinar sus cabezas y asentir mientras caminaba. ¡Qué cosa ha hecho Chile. Ellos dicen en televisión, "Chile necesita esto." Pero el mundo lo necesitaba. Y el mundo lo sabía: Es por eso que vieron, un billón de ellos, como los hombres salieron de la mina.

¿Por qué el mundo necesita? Debido a que el ahorro de esos hombres nos dio algo que no vemos suficiente, un brillante ejemplo de la excelencia humana, de la cohesión, la acción unida y comprometida, de la planificación y ejecución, de cuidar. Ellos usaron el cerebro humano y el espíritu para salvar vidas. Todos tenemos todo el día, y cada día es un escándalo. Sin embargo, esto inspira.

Viva Chile. Salieron sin dejar ningún hombre atrás. Eso es lo que nuestros Rangers del Ejército de EE.UU. dicen, también nuestra Infantería de Marina: Salimos sin dejar ningún hombre atrás. Tiene un significado, este lema militar, esta forma de operar. Esto significa que no están solos, que son parte de algo. Tus hermanos están con ustedes, aquí vienen. Chile, en no dejar a ningún hombre atrás, al insistir que la mina de San José fue una zona de desastre, pero no una tumba, demostró ser un gran ejemplo de que lo poco que está en el núcleo de toda sociedad: la familia en pleno funcionamiento. Una unidad cohesionada que pueda hacer su camino en el mundo.

"Viva Chile". Eso es lo que todos dijeron, de una forma u otra, al salir de la cápsula, apodada Fénix. La podrían haber llamado Lázaro, para los que ha resucitado de los muertos. Cada uno de los mineros, en las 10 semanas que pasaron a una profundidad de media milla en el desierto de Atacama, pudieron haber conocido sus probabilidades. Durante dos semanas, nadie sabía que estaban vivos. Entonces esta semana allí estaban, uno por uno, regresando a la superficie. Ellos deben haber pensado, "Chile, que no nos olvide. Chile podría haber dicho« Un accidente, una tragedia, los hombres están muertos, o haber dejado que los hombres murieran. " Pero no dejó que los hombres fallecieran. " ¡Qué cosa es saber acerca de su país.

Viva Chile. Así que muchos hablan de la fe, porque los mineros tenían fe. Un familiar de un minero, cuando los hombres empezaron a aparecer indicó: "Es un milagro de Dios." Un minero salió de la cápsula y se puso de rodillas en frente de la nación, diciendo oraciones que él prometió en el fondo de la mina, él diría, santiguándose dos veces, y levantando los brazos en señal de gratitud, entrega y temor. Un minero, después de que salió de la cápsula, que describe su experiencia personal: "Conocí a Dios me encontré con el diablo, Dios ganó..."

Así que muchas naciones y líderes han crecido dotados en hablar. O por lo menos hablan demasiado. Las noticias hablan, los políticos hablan, se dan vueltas hablando, el comercio habla: Hay naciones, y nosotros a veces somos los peores entre ellos, cuya más grande exportación parece ser la charla. Sin embargo, Chile ha actuado esta semana ha movido al mundo no por hablar sino por actuar, no por expresar de boca su apoyo a los mineros, pero si poniéndolos a salvo. Todo el país-los ingenieros y técnicos, el presidente, el gobierno, los rescatistas, otros mineros, los médicos-se pusieron de acuerdo para hacer algo duro, específico, física, exigiendo el compromiso, la precisión y la experiencia. Y lo hicieron.

Homer Hickam, el hijo del minero del carbón convertido en ingeniero de cohetes que era el tema de la película de 1999 "Cielo de octubre", dijo el miércoles a la cadena MSNBC que era "como una misión de la NASA." Organizados a través del pensamiento de "mantenerse en la línea de tiempo, el pensamiento secuencial." "Esto es muy maravilloso", dijo. "Este es el aterrizaje de Chile en la Luna", dijo un periodista de NBC News.
La tecnología se utilizó hábilmente, de manera creativa, y como una fuerza del bien. No todo el mundo la ha utilizada con éxito en el pasado reciente, otra razón que el mundo necesita ver esto. El verano pasado, los estadounidenses vieron a profesionales y al gobierno parecer impotentes para detener el derrame de petróleo del Golfo, un desastre todo tan predecible como una mina de derrumbe. Durante meses hemos visto en el televisor fluir el petróleo en el mar. En Chile, todo lo contrario. Se mostró vídeo en directo de los rescatistas en el pozo, ingresando a los mineros en la Phoenix. Nuestro video dijo: Algo está mal aquí. Ellos dijeron: Algo está trabajando aquí.

Un gobierno de una democracia madura y compleja en sí demostró ser capaz y competente. Este fue alentador y sorprendente. Los gobiernos se encargan de hacer ciertas cosas vitales y necesarias, pero están sobrecargados, distraído, por lo que ya no esperan que les vaya bien.

El Presidente Sebastián Piñera, en el cargo cinco meses cuando la mina se derrumbó, vio la situación por lo que era: treinta y tres hombres en un hoyo en la tierra, en una mina que probablemente no debería haber estado abierta. Un desastre, una nación conmovida.

¿Qué hacer? Te tiras en el problema. Usted dirige su gobierno: Esto es lo que hacemos ahora. Usted dice: "Vamos a buscar a los hombres." Usted pone su personalidad entera detrás de él, lo pones todo en la línea, se apuesta que su país puede hacerlo. Puedes confiar en tu país para hacerlo. Usted hace todo lo posible para ver que su país lo realice. Y el día en que se inicia el rescate, usted no se presenta y la gente retuerce sus manos y pueden decir "Ah, él sabía que no podría funcionar, que no era realista, que nos estaba diciendo que nuestras esperanzas se venían abajo.." No, usted estaba de pie sonriendo con alegría porque sabia que todo iba a funcionar, usted sabia que su gente le tendría confianza. Y así usted irradió su alegría y permaneció desde el primer momento en que comenzó el rescate y hasta el momento que el ultimo hombre fue rescatado. Usted permaneció. Usted estuvo presente.
Era lo opuesto a la gobernadora de Luisiana durante Katrina, proyectando impotencia y perdida de control, o el presidente sobrevolando la tormenta, o el alcalde acorralado en un motel decidiendo si esto podría ser un buen momento para un análisis. Esto fue alguien asumiendo la responsabilidad.

El caso trascendió las diferencias de clase, las barreras sociales, las diferencias entre regiones. La nación entera, ricos y pobres, de todos los colores y edades-se unió. Los científicos e ingenieros dieron todo para salvar a los hombres, de clase trabajadora, que habían vivido duros momentos. "Cada uno de ellos quien subió a la superficie fue tratado como el primero", dijo un reportero de MSNBC.

¿Qué es lo que hace a los hijos de una nación para ver eso? Cada uno de Chile se enorgullece de ir por el mundo. "Tú has salvado a los mineros." los niños chilenos lo saben, "Somos la clase de gente que luchamos por sacarlos con vida. Levantamos en alto nuestra moral para hacerlo y lo hicimos."

Es un evento de transformación significativo para esa nación.

Una nota de cierre, otro contraste. El presidente Obama dijo esta semana al New York Times, al hablar de sus primeros dos años, que se dio cuenta demasiado tarde "no hay tal cosa como proyectos listos." Él es impotente frente a la ley de declaración de impacto ambiental. Pero toda ley, incluso aquellas, se pueden cambiar si usted tiene la visión, voluntad, el instinto y agallas para hacerlo, si usted comienza temprano, si no está distraído por otras actividades.
"Listos a la acción." Chile acaba de demostrar, en el sentido más profundo, que es exactamente esto. Y al hacerlo, se movió el corazón duro del mundo.

Viva Chile.