martes, 19 de octubre de 2010

Quo Vadis Concertación?


¿Dónde está la Concertación? ¿Se escucha su opinión? ¿Son válidos, coherentes y de peso sus reclamos ante el presupuesto para el 2011?
Una opinión (la mía) :) , en mi blog


La Concertación parece hundida en el mismo pozo en que estaban los 33 mineros hace algunos días; allí trata de curar las heridas que los últimos acontecimientos le han causado dejándola aún más lejos del poder que añora y que creía iba a conservar para siempre.
Los argumentos, su discurso y las opiniones que esgrimen para atacar al gobierno de Sebastián Piñera aparecen débiles, de política con minúscula.
Por ejemplo, sus dichos en oposición al presupuesto para el 2011 parecen añejos y vacíos de todo contenido. Reclaman porque varias partidas en ese presupuesto se han rebajado, argumentando que los recursos asignados son insuficientes para alcanzar los objetivos que se supone deben alcanzar. Sin embargo, la realidad es otra; si antes se necesitaban 100 pesos para financiar algún programa, hoy, gracias a una mejor gestión de los recursos y un mejor control del gasto, sólo se requieren 50, 60 u 80 pesos.Para decirlo con franqueza: ahora no se alimentan los bolsillos de gestores o intermediarios de planes de todo tipo que se presentaban con bombos y platillos y que, se suponía, iban en beneficio de los más necesitados pero que, en el fondo, sólo perseguían asegurar los votos para la próxima elección creando la falsa sensación de una verdadera preocupación por los más pobres. Dicho de otra manera, muchos de esos generosos planes no eran más que una limosna temporal con cargo a nuestros impuestos.
El actual gobierno, como todos los de la Concertación, es político y podría caer en el mismo error pero, por ahora, las señales van en otra dirección: medidas para generar más empleos, reducción de trámites para fomentar el emprendimiento, incentivos económicos para formar más y mejores docentes, participación de profesionales y políticos en el gobierno (antes eran sólo políticos), etc. Espero que esas señales sigan marcando el rumbo del actual gobierno.
Por ahora, el ducto por el cual salieron los 33 mineros está tapado y del fondo de él las voces de la Concertación se oyen débiles y difíciles de entender. Y si a un político no se le entiende su mensaje, su despido de la actividad pública está a la vuelta de la esquina.


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