Amigos
Días atrás escuchaba a un prócer de la Clase Política que nos exhortaba a seguir construyendo Chile, y sus palabras, su porte, sus ademanes, eran tan convincentes, conmovedores, republicanos.
Minutos mas tarde tome un taxi y escuchaba a un trabajador del Estado Llano que, sin aspavientos heroicos, me contaba como trabajaba todo el mes para sacar unas 600 lucas de las cuales casi la mitad se le iba en bencina y la mitad o casi la mitad de esa bencina se le iba en IVA e Impuesto Especifico.
No pude menos que pensar que el prócer conmovedor había recibido 100 millones de pesos para una Fundación propia, y quien se la financio fue el trabajólico taxista que "construía" Chile de la mañana a la noche, y cuyo sudor iba----vía IVA e IE---a financiar al noble prócer.
Me acorde de estas reflexiones leyendo la Carta del Profesor que envió Carlos Contador y que me hizo acordar de Hamlet cuando dice "algo huele mal en Dinamarca".
Por ultimo, ese taxista debería "descargar" ambos impuestos, como lo haría cualquier empresario, (especialmente si no es PYME,) ya que los mejores negocios de Chile ni siquiera pagan IVA (Universidades privadas, Autopistas, etc.)
HP
jueves, 25 de noviembre de 2010
CONVERSANDO CON UN TAXISTA
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