DEL BLOGS DE HERMÓGENES
lunes 27 de diciembre de 2010
"Control de Daños"
Si alguien cree que los informes filtrados por Wikileaks, relativos a Sebastián Piñera, pueden llegar a tener alguna importancia entre la opinión pública chilena, está equivocado.
Primero, porque este gobierno, precisamente por ser el de Sebastián Piñera, maneja como ninguno lo que se llama "el control de daños". Esto se traduce en que las cosas que a él no le conviene que se sepan, no se saben. Luego, lo más dañino de los Wikileaks que lo afectan no se conocerá a nivel masivo en Chile.
La parte más comprometedora para él de esos Wikileaks se refiere a su gestión en el Banco de Talca, a comienzos de los años '80. Pero los detalles de eso tampoco esta vez se van a publicar. Son las 10.15 de la noche y ya he visto las versiones sobre los Wikileaks de los noticieros de Canal 13 y de TVN. En ninguno de ambos se menciona el caso del Banco de Talca. Sólo se dice que el gobierno norteamericano ha dado explicaciones y ha dicho que sus funcionarios se equivocaron. La vocera del Gobierno y el Canciller han declarado lo mismo. El daño está controlado.
En el caso de dicho banco, lo está desde hace muchos años. De partida, porque el expediente se perdió. De otro modo alguien habría podido examinarlo y publicar todas las cosas que se acreditaron en él. Pero se extravió.
Sólo Radio Cooperativa reprodujo lo que "El País" de España publicó acerca de lo obrado por Sebastián Piñera como gerente de dicho banco. Pero eso no se va a reproducir en Chile. Para eso está el "control de daños".
Uno de los Wikileaks presenta a un diplomático norteamericano diciendo, en 2009, que los antecedentes negativos sobre Piñera parecían no importarle a la opinión pública de acá. Y eso fue y es efectivo. A la opinión pública no le importan mucho, en particular porque el "control de daños" del entonces candidato y ahora Presidente es muy eficaz.
Por ejemplo, un detective que estuvo encargado de su detención en los años '80 fue desmentido por Piñera, pero el detective se querelló contra el candidato ante un tribunal sureño. Ese juicio pudo haber sido noticia, pero con motivo del primer comparendo, el representante de Piñera logró que el detective se desistiera y ahí terminó todo. Fin del episodio. "Control de daños".
Yo he predicho en anteriores blogs que ciertas noticias que lo afectaban, publicadas en "La Segunda", no iban a aparecer en ningún otro medio. Como "La Segunda" se confecciona muy rápido y muy temprano, es difícil "controlarla". Así sucedió con la noticia aparecida el 19 de diciembre de 2009 relativa a la extraña votación en una comisión investigadora de la Cámara que rechazó pedir una grabación sobre compra de acciones con información privilegiada. Esa noticia no apareció nunca en ningún otro medio. Hace poco predije que tampoco aparecería en ningún otro medio la solicitud de que se formara otra comisión investigadora, esta vez por pago de una comisión por parte de una filial de LAN, en 2005, a un asesor de Transportes argentino, previa a la autorización de los vuelos de la aerolínea en ese país. Pronóstico cumplido. No salió en ninguna otra parte. "Control de daños".
Luego, el caso Wikileaks Piñera desaparecerá pronto de la actualidad. Brevemente tratado en la prensa, porque "hay que decir algo", haciendo como que "se da la noticia"... pero sólo lo que "se puede dar". Lo sustantivo de ella sólo fue dado a conocer fugazmente por Radio Cooperativa, que reprodujo lo que publicó "El País". Pero nadie más lo hará. Lean la prensa de mañana.
Fin de la historia. Eso explica por qué, según los Wikileaks, en 2009 los antecedentes negativos del candidato Piñera no parecían importarle a la opinión pública chilena. Tampoco le importan en 2010, entre otras razones porque en gran parte no se dan a conocer, y porque, si se conocen parcialmente, son "desvirtuados" por el "control de daños". Y así, sucesivamente, todo va siendo barrido bajo la alfombra.
Hasta el próximo episodio.
Publicado por Hermógenes Pérez de Arce
martes, 28 de diciembre de 2010
" CONTROL DE DAÑOS "
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