jueves, 11 de agosto de 2011

¿POR QUE NO ME QUIEREN?






PARRAFOS MARCADOS DE LA ENTREVISTA EN “EL MERCURIO” DE 7 DE AGOSTO DE 2011, A EUGENIO TIRONI.

SIENDO DE LA CONCERTACIÓN… ¡CUANTA VERDAD ¡

“La gente no le tiene afecto (a Piñera) porque lo eligió por razones instrumentales”.

“Barrancones…fue un hito. Bastó…un aletazo por parte de un movimiento social para que el Presidente torciera la línea de la institucionalidad, vulnerando el ’carácter sagrado´ que le habíamos dado a la técnica. Ese fue como el síndrome de una enfermedad: que este Presidente no puede vivir sin popularidad y por la popularidad está dispuesto a entregarlo todo”.

“La popularidad del Presidente Piñera se desploma antes de que caiga su gobierno”.

“Fuimos a conversar con gente de la calle y nos decían: ´Yo pensé que realmente mi vida iba a cambiar con este gobierno, y mi vida sigue igual´”.

“La pregunta es por qué a la gente le sabe más amarga la marraqueta…con este gobierno que con los anteriores. Y descubrimos que sabe más amarga porque las personas no le tienen afecto y por lo tanto no le perdonan”.

“La gente no le tiene afecto porque lo eligió por razones estrictamente instrumentales”.

“Le creyeron que como él era propietario de Lan, el Transantiago se iba a arreglar”.

“Piñera se encargó, para hacer creíble su propuesta, de maltratar a la derecha. Era un candidato que estaba rodeado por gente que votó por el SÍ, pero frente a ellos y con ellos sentados en la tarima decía: “Yo voté por el NO. El tiempo de la dictadura fue atroz” y todos tragaban saliva y se mordían la lengua. O sea ¡Los maltrató!

“Y se quedó con un grupito muy pequeñito de gente con las cuales él había hecho negocios en el pasado, con la cual tenía una relación comercial más que de otro tipo, pero no un ejército de incondicionales”.

“Un gobernante tipo Lagos, Bachelet, Frei o Aylwin tenían redes de partidos, una cierta línea de crédito afectiva…este Presidente se encargó justamente de romper todos esos nexos para ser elegido”.

“La gente ve que quienes gobiernan son demasiado ajenos a ellos. Son como tan esbeltos y los que no lo eran, se han puesto…tienen tantos estudios, tienen sus Mac, sus Starbucks, sus familias, se ven tan bonitos, parecen todos los Kennedy. ¿Dónde están los pelados, dónde están esas señoras que llegaban a La Moneda…y que se comían los sanguchitos y que se los llevaban a los niños? Pero estos son los Kennedy, un grupo de celebridades se tomó La Moneda”.

“Pasa un año y no pasa nada. Y siento que la anduve embarrando. Y cuando uno siente que la embarró empieza a encontrar todo mal. Acá se cometió un error gigantesco: que como candidato generó muchas expectativas…una persona como Piñera desde el día uno se debió haber dedicado a bajar las expectativas, y él se dedicó a aumentarlas”.

“Piñera no soporta una baja rentabilidad en sus inversiones. Y él aquí no soporta una baja popularidad de lo que es su inversión mayor, que era llegar a la Presidencia de la República”.

“Ha tenido que aceptar en su propio Gobierno a un grupo que lleva añorando por muchos años la manera de destruirlo, no como persona, sino como manera de ver al mundo, que es un poco lo que está detrás de Longueira y de la UDI Popular.”

“Este Gobierno son una elite que viene de otro mundo”.

“¿Sabes por qué no te quiero? : No tengo química contigo. Te encuentro frío. Tienes una expresión artificial. Nunca te muestras débil. Lo entiendo: eres un negociador y los negociadores no pueden expresar debilidad: están siempre ¡OK!. Eres el rey del autocontrol. Todo lo tienes pensado y calculado de antemano, incluso los chistes o salidas de libretos. Te ríes cuando hay que llorar y lloras cuando hay que reir. No te ves nunca natural, y esto no me da confianza. Me vas a perdonar, pero no te creo. Te puedo respetar, pero no me pidas que te quiera”.


1 comentario:

José Caballero dijo...

A Piñera lo escogieron porque no había otro candidato. Además es natural que cuando el tipo de gobierno imperante (concertación) lleva mucho tiempo ejerciendo se corrompan y caigan... Falto la firma no debería temer ya los tiempos no están para hablar desde el anonimato