IGLESIAS Y CEMENTERIOS EN PELIGRO DERRUMBE

Patrimonio religioso:

Más de un 70% de los templos capitalinos sufrió graves daños en su interior y exterior. Los cementerios corrieron la misma suerte.

Gustavo Villavicencio
El Mercurio.

Ayer a las 15 horas, el panorama era desolador en el 1er Monasterio de la Visitación (Huérfanos 2341), las 20 monjas que habitan el lugar esperaban ansiosas que las autoridades eclesiásticas las visitaran, para enterarse del estado del templo y del convento. Las horas pasaron y nadie llegó. Su Superiora, la Madre Isabel Fuenzalida, señaló a "El Mercurio", "la iglesia se clausura de por vida, no tenemos dinero para repararla y el Monasterio corre peligro de derrumbe, nosotras vivimos de la providencia. Es una iglesia que se construyó en 1930 y es una de las más bellas y escondidas del centro de Santiago", comentó la religiosa que ha vivido estos últimos 52 años en el lugar y que no se resigna a tener que dejarlo.

A pocas cuadras de la Visitación, se encuentra el Monasterio de las Adoratrices, que ayer no podían creer cómo el sol se filtraba por las grietas del centenario templo. La iglesia de estilo barroco perdió todo su altar de mármol y se desplomó una de las cúpulas.

Por su parte, la Iglesia de la Gratitud Nacional, inspirada en la catedral francesa de Chartres, sufrió el derrumbe de su techumbre y sus muros se abrieron. Lo mismo sucedió con capilla del Colegio de los Sagrados Corazones de Alameda, cuyo frontis se desplomó.

Pasadas las 18 horas, los alrededores de la Basílica del Salvador fueron evacuados, ya que parte de una de las naves laterales cayó hacia la calle Almirante Barroso. Actualmente la Iglesia Católica gestionaba 3.000 millones de pesos provenientes del Programa Puesta en Valor Patrimonio-Bid, para su restauración, la cual ahora corre el riesgo de no realizarse, ya que el edificio tendría que ser derrumbado por convertirse en un peligro. Pasadas las 20 horas, las autoridades municipales no habían aparecido en el lugar.

A la centenaria Capilla de las Ánimas (a su costado se construirá el primer Monasterio del centro de Santiago) ayer no se podía ingresar, su techumbre y campanario se desplomaron y el interior de la iglesia estaba cubierto por una cortina de humo que no permitía ver el deterioro del lugar.

Otra iglesia que sufrió los estragos del terremoto fue San Isidro Labrador, la cual ya corría peligro de derrumbe hace algunas semanas. Sus murallas se desplomaron y cayeron las vigas de su interior. Mientras que la iglesia de la Divina Providencia lucía su campanario completamente en el suelo, en su interior sólo cayeron las molduras, ya que después del terremoto del 85 se colocó una estructura metálica por dentro del templo, que impidió que éste se quebrara aun más con este terremoto.