OTRAS DOS VÍCTIMAS DEL MARXISMO

DE CHILE INFORMA EDICIÓN Nº 638

El próximo 3 de marzo de 1991, se cumplen 20 años del
alevoso homicidio, en la ciudad de Rancagua, del médico
militar Carlos Pérez Castro, y de su esposa, Anita Schlager
Casanueva. Ambos fueron ultimados a tiros por dos
terroristas del Frente Manuel Rodríguez.
Carlos Pérez Castro tenía el grado de mayor.
El homicidio ocurrió en los inicios del gobierno de Patricio
Aylwin. En los primeros minutos de ese día, el matrimonio
regresaba a su casa, situada en la carretera del Cobre.
Al descender del vehículo, para ingresar a la casa, fueron
acribillados.
La investigación estableció con total certeza que los dos
homicidas pertenecían al Frente. Ellos fueron Pablo Vargas
López y Adolfo Fedor Sánchez Piderit.




Pablo Vargas López y Adolfo Fedor Sánchez Piderit.
El 15 de octubre de 1995, la segunda sala de la Corte
Suprema los sentenció a cadena perpetua a Vargas López y
a Sánchez a 15 años de presidio.
Sin embargo, ambos están libres. Fueron indultados, en el
2004, por Ricardo Lagos Escobar.

Despierta Chile: www.despiertachile.cl
Despierta Chile, un diario electrónico, claramente no
marxista, sobre este crimen señaló:
“Es poco probable que usted se acuerde del asesinato en
Rancagua de un mayor de Ejército y de su esposa cuando
llegaban a su domicilio, atentado terrorista ocurrido en pleno
Gobierno de Don Patricio Aylwin Azócar, en plena democracia.
¡Es increíble como somos y como actuamos los chilenos!
(Para El Mercurio, la noticia no era el doble asesinato, sino que
él, como médico, había cumplido funciones en la CNI)
Un homicidio de un Orlando Letelier y de su secretaria en
Washington, ocupó la atención nacional, no solamente por
años, fue utilizado en procesos donde los Tribunales de
Justicia han tenido jurisdicción hasta en la capital de Estados
Unidos; se ha pagado indemnizaciones de millones de dólares
a la familia Letelier, cuando ni siquiera la Justicia había dictado
sentencia.
Y qué insólito es que no sepamos del asesinato de un
distinguido mayor del Ejército de Chile, ejecutado por
delincuentes del “Frente terrorista Manuel Rodríguez”.
De este chileno, que es tan o más importante que un Sr.
Letelier, nadie recuerda su injusto y trágico fallecimiento, no
hay pagos, ni dólares para sus deudos y a él lo asesinaron en
compañía de su esposa, no de su secretaria o de su amante.
El “Frente terrorista Manuel Rodríguez”, realizó este crimen
como continuación de los asesinatos del Comandante de
Escuadrilla de la Fuerza Aérea, Roberto Fuentes Morrison y del
Coronel de Carabineros Luis Fontaine.
El gobierno de Aylwin no dijo nada
¿El Consejo de Defensa del Estado se hizo parte en alguno de
estos procesos?
¿Hay chilenos de primera y de segunda clase?
¿Hay un monolito en el lugar de este cruel asesinato?
¿El Ejército les hace una misa recordatoria?
¿Ha existido algún apoyo para esta familia, para lo que quedó
de ese hogar?
¿Ha habido alguna indemnización para ellos?
No hay ninguna respuesta favorable a estas interrogantes.