lunes, 26 de noviembre de 2012

MAYA FERNÁNDEZ ALLENDE, LO QUE DE SU ENTORNO FAMILIAR NO HA CONTADO LA PRENSA





DE CHILE INFORMA EDICIÓN Nº 1.167

Nuestra prensa y sus periodistas, a raíz de las reñidas
elecciones producidas en la comuna de Ñuñoa, por la alcaldía,
mucho nos han contado de Maya Fernández.
En verdad ella, por si misma, no tiene atributos sobresalientes
que sean noticias, pero, a falta de éstos, la prensa de izquierda
le coopera. contando que es nieta directa del Presidente
Allende, omitiendo que Allende fue el peor presidente de Chile
del siglo pasado) pero sí destacando que es sobrina de la
senadora Isabel Allende, hija del mandatario y tan socialista
como él.
Pero curiosamente hablan más de la tía que de la madre de la
candidata a alcaldesa.
Maya es hija de Beatriz Allende Bussi.
Beatriz, como su padre, se suicidó, algo que a los socialistas
no les gusta contar. Ella, además, no se suicidó en Chile, sino
en Cuba, la isla-cárcel donde vivía.




Y decimos que se suicidó porque esa es la versión más
difundida de su muerte. En Cuba, sin embargo, muchos
sostienen que ella fue asesinada.
Versión que añade que fue mandada asesinar por los servicios
de la inteligencia cubana, pero que al asunto se le echó tierra.
En este caso, y a diferencia del general Bachelet, de Eduardo
Frei o de José Tohá, el marxismo no dice nada. Nadie pide una
investigación. Ni siquiera la familia Allende. Misterio.
Perfil de Beatriz Allende, la mirista
Beatriz, la hija de Allende, y madre de Maya, la candidata PS
por Ñuñoa, nació en septiembre de 1943. Son tres mujeres los
hijos del matrimonio Allende Bussi.
Beatriz estudia medicina en la Universidad de Concepción,
cuna del mirismo en Chile. Ella misma ingresa al MIR, es una
de sus dirigentes y conocedora de sus militantes.
Incluso en Medicina de la U. de Concepción es compañera de
curso de Miguel Enríquez. De las tres hermanas es la más
izquierdista.
Estuvo varias veces en Cuba, En 1960 lo hace como delegada
de los estudiantes de la Universidad penquista. En 1967 vuelve
a la Isla, pero ahora no de visita, sino en forma permanente,
aprovechando una beca de perfeccionamiento.
Ese mismo año, 1967, Allende, ya con dos derrotas
presidenciales a cuesta, contra Alessandri y Frei, llega a Cuba
como senador socialista para participar en la Conferencia tri
continental celebrada en La Habana, y donde los marxistas de
distintos países acuerdan infiltrar el marxismo cubano en las
demás naciones latino-americanos.
Beatriz es flechada en Cuba (se desconoce si en forma natural
o porque él cumplía una misión encomendada como galán) por
un apuesto cubano, Luis Fernández de Oña, quien no era un
personaje cualquier, sino un agitador y subversivo marxista
que se desempeñaba en el Ministerio del Interior de Cuba y
quien actuó como agitador en varios países sudamericanos, en
particular Bolivia y Chile.
Beatriz se enamora de este sujeto y mantiene con él una
relación estable, que se interrumpe o distancia tiempo después
porque él es enviado a misiones a otros países y Beatriz,
regresa a Chile pues está ahora embarcada con la revolución
marxista en Bolivia.
Pertenece ella al Frente de Liberación Nacional de Bolivia, y
actúa en la clandestinidad en Chile y en Bolivia.
Al igual que otros miristas, Beatriz tenía una “chapa’’. Era
“Marcela’’.
Aparece como encargada de comunicaciones de ese
movimiento insurgente.
En distintas publicaciones figura como encargada de preparar
y despedir en Chile a los “guerrilleros’’ que van a Bolivia a
tratar de derrocar al gobierno.
Se la menciona, además, como persona que, por sus
contactos, mandaba armas de modo clandestino al Altiplano y
mensajes usando desde Chile “medios radiofónicos’’.
Su amado, Luis Fernández, está camuflado en Bolivia.
Beatriz, suspende estas labores en la guerrilla, en 1970, cuando
su padre tiene posibilidades reales de alcanzar la presidencia
de Chile.


Allende y Beatriz
Se desempeña en su tercera campaña presidencial como su
secretaria personal, su asesora política y su contacto con el
MIR, donde está su primo hermano, Andrés Pascal Allende, hijo
de la senadora Laura Allende, hermana de Salvador.
No era Salvador el candidato que Fidel Castro quería para
Chile, sino el mirista Miguel Enríquez, pero cuando la cúpula
cubana visualiza que es Allende quien tiene posibilidades
reales de alcanzar el poder, deciden influir más en él y en los
asuntos internos chilenos.
Beatriz, conocida en los círculos políticos de La Habana, por su
postura más izquierdista que su padre, es aconsejada que su
padre va a necesitar un equipo que lo asesore en materia de
inteligencia, de seguridad y de traslados.
Y es Beatriz, Tati para sus cercanos, quien convence a su
padre de la necesidad de tener un equipo propio de seguridad,
que no tenga relación con Carabineros o Investigaciones como
había ocurrido hasta ahora.
Es ella una de las creadoras del “GAP’’, grupo de amigos
personales, donde aparecen miristas del gusto cubano como
Carlos Ominami. Max Marambio y la misma Tati.
Al examinar a los integrantes del GAP es fácil observar desde
sus comienzos una fuerte pugna entre sus integrantes
provenientes del PS y del MIR.
La hija y asesora política de Allende continúa sus relaciones
con el “diplomático’’ cubano (en lo formal) Luis Fernández de
Oña, quien es, para Chile, un personaje siniestro, además de
funesto.
Fernández en Cuba sigue haciendo carrera. Castro lo nombra
encargado de Chile dentro del llamado “Departamento
América’’.
Ese departamento tenía por misión imponer el comunismo en
toda América del Sur.
Fernández es nombrado la máxima autoridad en la labor de
infiltración en Chile. Trabajaba directamente bajo las órdenes
de Manuel Piñeiro Losada, conocido como “Barbarroja’’, un
individuo que daría para varias crónicas.
Junto con Fernández, y para imponer en Chile el comunismo,
llegan los hermanos Guardia, uno de los cuales era general del
Ejército cubano.
Lo concreto es que 22 días después del triunfo de Allende, con
apenas un 35 % en las urnas, y antes incluso que fuera
proclamado Presidente por el Congreso Nacional, ya tenemos a
Fernández, el padre de la cuasi alcaldesa de Ñuñoa, instalado
en Santiago.
Allende aún no asume, pero él está con la misión de ejercer
como “encargado de negocios en Santiago’’, porque en 1970,
Chile no tenía relaciones diplomáticas con Cuba.
DURANTE LA UP, NACE MAYA
Asume Allende y poco después establece o restablece
relaciones con varios países de la órbita comunista. Uno de
ellos es Cuba y aparece otro agente de la inteligencia cubana
como primer embajador de Cuba en Santiago, Mario García I.
Durante el gobierno de Allende llegan y permanecen en Chile
“miles’’ de cubanos en las más variadas tareas, pero en el
fondo, tratando todos de imponer el comunismo a piedra y
lodo.
El cubano Fernández embaraza a Tati, la hija del Presidente, y
ésta es madre en septiembre de 1971.
Nace Maya Fernández Allende. Si la misma, la candidata a
concejal por Ñuñoa.
Ambos ahora tienen como punto de encuentro la Embajada de
Cuba en Chile, en Santiago, que es el centro de la agitación
roja.
Luis Fernández coopera con Allende padre en labores de
“seguridad’’ e “inteligencia. Aparece como asesor político en la
embajada cubana, pero en esencia es un alto funcionario de la
Oficina América, dependiente del Ministerio del Interior de
Cuba.
Pasa el tiempo, y el 11 de septiembre de 1973, Beatriz Allende
está embarazada por segunda vez.
Ella, esa mañana, se viene a La Moneda, a pesar de sus siete
meses de embarazo, a solidarizar con su padre.
Distintas personas la recuerdan esa mañana revólver en mano
dentro del Palacio.
Depuesto el gobierno marxista de Allende, Beatriz, su hija
Maya, y el mismo Fernández, arrancan hacia la embajada
cubana en Santiago.





La Junta Militar, el mismo 11 por la tarde, anuncia a los
chilenos su decisión de cortar relaciones diplomáticas con el
régimen castrista, y les da 24 horas a sus representantes para
abandonar el país.
La madrugada del 13 de septiembre de 1973, un avión cubano
repleto de marxistas, despega desde Santiago rumbo a La
Habana.
Beatriz se instala con su familia en el barrio Miramar, de La
Habana, en un inmueble que les proporciona el gobierno
cubano.
Pronto Maya, tendrá un hermano.
Fidel Castro decide y decreta que el niño no llevará el apellido
materno como tal, sino que será el paterno, y ordena que sea
llamado Salvador Allende Fernández.
Castro tiene poderes para hacerlo.
El hermano de Maya ya adulto, no vive en Chile ni en Cuba. Lo
hace en Nueva Zelanda, alejado de la política.
Curiosamente, el nombre de Maya de la actual candidata
socialista a alcalde, lo eligió su madre, Beatriz.
Salvador Allende y Hortensia Bussi junto a su nieta Maya Fernández
Ella cuando perteneció a la guerrilla de Bolivia conoció a una
subversiva llamada Rita Valdivia, de quien se hizo amiga.
Rita, muere en La Paz, a fines de 1969. Dentro del Frente, su
apodo era Maya.
Beatriz decidió poner ese nombre a su hija, en recuerdo de la
amiga terrorista.
Su vida en Cuba
Beatriz en Cuba tuvo un buen pasar al comienzo. Se la trató
con afecto, le dieron grandes facilidades, pero el tiempo pasa,
y ella es cada vez menos importante para la revolución cubana.
Hay además otro detalle importante. Luis Fernández la
abandona en Cuba y ya no vive con ella.
En varias publicaciones uno encuentra que él era casado en
Cuba antes incluso de conocer a Beatriz. Al volver a la isla,
vuelve con su primera esposa.
Incluso no aparece documentación que acredite que él y
Beatriz se hayan casado.
Pero falta: personas de la Inteligencia cubana aseguran que el
nombre de Luis Fernández de Oña, no es el Luis Fernández que
conocimos en Chile, o al menos con ese nombre.
Sostienen que su nombre verdadero es otro, pero que por
razones de conveniencia política, el régimen cubano le colocó
legalmente éste.
Beatriz, la madre de Maya, se suicida en La Habana, el 11 de
Octubre de 1974, Lo hace en su casa, mientras los dos hijos
menores estaban en clases.
El gobierno cubano lo difundió de forma escueta diciendo que
se disparó con un revolver en su sien, producto que pasaba
una depresión muy grande. Y jamás volvió sobre el asunto.
La versión no fue creíble para la prensa mundial. Muchos
sostienen que ella fue asesinada y por orden del oficialismo.
La pregunta que se hacen es demoledora: Quien conozca la
realidad de Cuba, sabe que en ese país todas las armas están
en poder del Estado, no de las personas. ¿De dónde sacó el
arma?
Cuba es el país latinoamericano que registra más suicidios,
pero se eliminan no con armas, y la razón está explicada.
No deja de sorprender que no sólo salvador Allende, sino
también su hija, se haya suicidado. Beatriz lo hizo cuando tenía
33 años.
Pocos años después, también en Cuba, se suicidó Laura
Allende, hermana de Salvador, lanzándose al vacío desde el
piso 16 de un edificio de altura en La Habana.
Del padre de la candidata, los últimos indicios lo indican como
una de las piezas clave en el envío de armas, municiones y
explosivos a Chile, por vía marítima. En el desembarco de
Carrizal y en la preparación de los terroristas que atentaron
contra el presidente Pinochet.
Pero nuestra prensa, esta vez, no hizo relación alguna entre el
papá de la candidata por Ñuñoa, y el asesino que, en los
últimos comicios fue elegido concejal en Puente Alto.

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