NIEMEYER CAPTURADO

La PDI lo recapturó ayer en un departamento de Estación Central:
El intrincado periplo con que Niemeyer evadió a la policía durante casi cinco meses

Se ocultó en Santiago, Viña del Mar, Temuco y Cañete -zona del conflicto mapuche-, entre otros lugares. Ayer estaba en el hogar de un testigo de su causa.

P. Lezaeta y Ó. Saavedra
El Mercurio

Se había duchado hace un par de minutos y estaba sentado ante una mesa, listo para desayunar. Todo parecía normal, pero pasadas las 8:30 horas de ayer, un equipo de la PDI, que había seguido a su mujer cuando ella lo fue a visitar, golpeó la puerta del departamento de la Villa Portales, en Estación Central, donde un amigo lo alojaba. Los detectives lo vieron y él entendió que estaba cercado. Dos segundos después se entregó. Sin decir nada. Sin intentar nada.
Así terminaban los casi cinco meses de evasión del sociólogo Hans Niemeyer, a quien la Fiscalía Metropolitana Sur acusa por elaborar e instalar bombas.
El arresto fue la culminación de una larga indagatoria policial que descifró el intrincado periplo con el que Niemeyer evadió a la justicia luego que el 10 de diciembre de 2012 fuera declarado prófugo por no acatar el arresto domiciliario decretado en su contra, y para el cual fijó la casa de su madre. Su escape ocurrió, además, en medio de lo que en su momento se calificó como descoordinaciones entre el 13er. Tribunal de Garantía de Santiago y Carabineros, que debía vigilar el cumplimiento de la medida cautelar.
El sociólogo se habría ocultado en el entretecho de dicha vivienda un par de días. Salió a otro escondite y volvió. En ese momento Carabineros fue a chequear si estaba en la casa y uno de los moradores aseguró que no estaba. Luego se volvió a ir y habría acampado en terrenos de la Comunidad Ecológica de Peñalolén. Eso ocurrió entre Navidad y la primera quincena de enero. También tuvo un breve paso por Pirque, trascendió.
Posteriormente, según pudo establecer la PDI, Niemeyer se trasladó a Viña del Mar. Allí estuvo en enero, en un departamento del centro. Y después de una audiencia en la que se le sobreseyó temporalmente, retornó a Santiago. Luego se hizo "invisible", gracias a lo que la policía califica como una amplia red de apoyo de familiares y amigos.
Durante el verano, y ante el asedio de la PDI, dejó la capital y se fue a Temuco, pasando por Concepción. Se escondió en Pucón gran parte de enero y en febrero viajó a Cañete (lago Lleulleu), donde habría tenido contactos con grupos mapuches. En algunos de esos movimientos estuvo acompañado de su familia: su pareja, Daniela Rodríguez, y su hijo de dos años.
A comienzos de marzo se instala en Santiago y se separa de su familia. Públicamente anuncia su paso a la "clandestinidad".
Testigo y protector
Así continuó hasta la noche del jueves, cuando se escondió en el departamento de la Villa Portales, domicilio que para la Fiscalía Sur tiene un significado relevante. Se trata de un inmueble de propiedad del profesor Roberto Serrano Loncón, quien trabó amistad hace años con Niemeyer en la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación, según datos del Ministerio Público. Tal información añade que Serrano sería uno de los fundadores del movimiento Federación Anarquista Libertaria. También es uno de los testigos presentados por la fiscalía en la acusación contra Niemeyer para dilucidar sus redes de apoyo.
Antes de su llegada a la Villa Portales estuvo en un domicilio en Independencia, a la altura de Vivaceta con Gamero, en el sector de Carrión (a metros de un cuartel de Carabineros), al menos durante siete días.
Después se movió a una casa en Plaza Brasil, en el cuadrante de calles Ricardo Cumming, Moneda, Agustinas. Su presencia fue detectada en esa zona en varias ocasiones, sobre todo en enero, luego de retornar desde la V Región.
También se ocultó en la población La Victoria, en el sector de La Coruña con avenida Central. Cerca de ese lugar funciona un par de radios comunitarias.
De ahí, volvió a aparecer en el sector del centro.
Durante toda esta dinámica de movimientos, la policía estudiaba los patrones de movimiento de sus familiares. Ninguno de sus vínculos directos, sin embargo, se movía hacia ese sector.
No obstante, el seguimiento realizado a su mujer permitió comprobar su llegada al departamento de Villa Portales cerca de la medianoche del jueves.
A las 8:30 horas de ayer, ella bajó a la calle para comprar dos marraquetas. Era la pista que faltaba.
En ese momento, los policías golpearon la puerta, y dieron con Niemeyer. Estaba con otro amigo, Andrés Rojas Castillo, quien accedió a que los efectivos ingresaran al departamento de calle El Belloto.
A las 14:00 horas, y fuertemente custodiado, Niemeyer fue llevado ante un tribunal que ordenó su prisión preventiva.
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''Él no estaba arrendando esta casa, llegó anoche a pernoctar. Probablemente iba a estar un par de días y después se iba a cambiar".
RAÚL GUZMÁN
FISCAL REGIONAL METROPOLITANO SUR
Juicio oral fijado para el 17 de junio
Para el 17 de junio quedó fijado el inicio del juicio oral contra Hans Niemeyer.
El abogado del sociólogo, Rodrigo Román, señaló: "Nosotros creemos que hay una afectación sin dudas del derecho a ser juzgado en un plazo razonable, porque en el fondo, el sistema, la sociedad, le tienen que explicar a un ciudadano que, por razones administrativas, tiene que esperar 50 días para ser juzgado sin ninguna justificación".
Datos clave
El 7 de diciembre pasado, luego de que un fallo de la Corte de Apelaciones de Santiago revocara su prisión preventiva, se le perdió la pista a Niemeyer. Eso fue confirmado tres días después por una ronda de Carabineros.
A Niemeyer se le indaga por la instalación de una bomba -que estalló en una sucursal bancaria de Ñuñoa, en noviembre de 2011- y fabricar otras tres.
El 25 de marzo de este año se conoció un comunicado del entonces prófugo en que señalaba que se presentaría a juicio.