sábado, 28 de febrero de 2009

SHOW DE FARKAS


Cartas
Viernes 27 de Febrero de 2009
Show de Farkas

Señor Director:

Posteado por:
Æðelstan Atkinson
27/02/2009 09:10
[ N° 2 ] Triste es la inmensa envidia que despierta ese generoso señor, los comentarios destemplados de los ecologistas que critican la ropa de su mujer (al parecer se creen árbitros de la moda, nos quieren obligar a todos a acatar su ridícula ideología), triste es que un animador se aproveche de él para subir su popularidad, triste es el arribismo que no soporta el éxito de ese gran hombre, triste es el conservadurismo transnochado y mediocre que no tolera lo original y auténtico, triste es el espíritu de pordiosero de nuestro pueblo que ansía los regalos y después se queja de su calidad. Tristes son los críticos de espectáculos que atacan a ese señor de buena voluntad que brindó un espectáculo de calidad musical correcta, pese a las deficiencias técnicas de las cuales es responsable la administración, que si bien no es un artista de excepción, supera a muchos que fueron pagados por la administración. Triste es también la extrema avaricia mostrada en las oberturas de casi todos los días, donde se han limitado a mostrar grises documentales y nada más.


Posteado por:
Pilar González Cañas
27/02/2009 09:25
[ N° 7 ] Sr. Sifri. Más que penoso y vergonzoso el show de Farkas, yo lo catalogaría de diferente, ameno y hasta genial. Hizo un show corto y de acuerdo a su personalidad. No estuvo en el escenario más de un tiempo aceptable y finalmente no incomodó a nadie.
Lo que sí me parece penoso y vergonzoso son estos grupos y conjuntos que se "toman" el escenario dando verdaderos recitales de hasta más de 2 horas, impidiendo el desarrollo del Festival mismo, con un público que brama histéricamente y como si fuera poco pidiendo todo tipo de premios para coronar su actuación, olvidando que estos galardones supuestamente están destinados para los concursantes.
Me parece que un Festival de la Canción debe ser eso y no un desfile de acróbatas, humoristas, y otros especímenes de relleno cuyas actuaciones muchas veces y debido al rechazo del "monstruo", les ha costado el derrumbe de sus carreras.
Creo que deberíamos tomar el ejemplo de festivales como la OTI, San Remo, etc. donde sólo van los concursantes al certamen, con un público que sabe apreciar la música y un jurado experto en su calificación.
Lo mejor de todas estas aperturas, ha sido sin duda Verónica Villarroel quien nos dio una lección magistral de música, sobriedad y "tiempo" sobre el escenario.

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