GOLPES Y ASONADAS MILITARES

COMENTARIO:

UD PIENSA SR. CHEYRE, QUE LOS COMUNISTAS ESTAN DE ACUERDO CON SU ARTÍCULO? MIENTRAS EXISTAN MALOS CHILENOS Y TRABAJEN PARA ELLOS Y NO PARA CHILE Y SUS PARTIDOS TENGAN PRIORIDADES EN SATISFACER A SUS PARTIDARIOS, NO CESARAN LOS GOLPES Y ASONADAS. LE PREGUNTO AL SR. CHEYRE, ¿ UD ESTUVO DE ACUERDO EN EL PRONUNCIAMIENTO MILITAR DEL 11 DE SEPTIEMBRE DE 1973 ? SI LO ESTUVO, UD ES TAN RESPONSABLE DE SU PERMANENCIA POR 17 AÑOS QUE LLEVÓ AL PAÍS AL DESARROLLO Y A LA DEMOCRACIA QUE HOY SUSTENTAN, COMO TAMBIEN QUE ENCARCELARAN A MILITARES HASTA HOY DIA . SI NO LO ESTUVO ¿PORQUE NO SE RETIRÓ DEL EJERCITO SIENDO TENIENTE?
RUS.

Juan Emilio Cheyre
Director Centro de Estudios Internacionales UC

El Presidente Piñera fue uno de los primeros mandatarios de la región que apoyaron a su par ecuatoriano ante la reciente sublevación policial en Ecuador; asimismo, impulsó activamente la reunión de Unasur para condenar la asonada. Posteriormente ha visitado por segunda vez el hermano país, solidarizando con el Mandatario ecuatoriano pese a las visiones políticas de ambos, que sin duda presentan diferencias. Es una clara señal de que Chile incluye, como valor clave de su política exterior, el respeto a la democracia y rechaza toda acción de fuerza que la ponga en riesgo.
Lo reseñado, con matices en las formas de materializarlo, fue la tónica en el actuar de los mandatarios de América Latina. Es una buena noticia, que busca mantener uno de nuestros mejores activos. En la región, salvo Cuba, todos los gobiernos han sido elegidos democráticamente. Constituye un avance que debe cautelarse a nivel de cada Estado a través de su participación en pactos que los reúnen. La cláusula democrática de la OEA y la manifiesta voluntad de la mayoría de los gobernantes reflejaron la vocación democrática de nuestros pueblos en el caso de Honduras, y ahora en Ecuador.
Pienso que los golpes militares, que condujeran a gobiernos autoritarios o dictaduras, no se repetirán. Sin embargo, pueden aparecer nuevos intentos de asonadas que terminarán por fracasar.
La mayoría adhiere a la idea de que para que ello no suceda debe ser reforzada la subordinación de los militares a la autoridad política. Ha surgido la idea de incluir una cláusula democrática en la Unasur y fortalecer la aplicación de la ya existente en la OEA. Concuerdo con esas iniciativas, pero creo que deberíamos preocuparnos de ciertos contenidos adicionales vinculados con ellas.
La mayoría de las FF.AA. de la región cumplen -algunas veces formalmente- la subordinación militar a los gobiernos democráticos y asumen que la política está en el vértice superior de la pirámide de decisiones en el quehacer interno y externo de los estados.
Sin embargo, se presentan tres desviaciones peligrosas. La primera es que en varios estados las FF.AA. no han asumido cabalmente un proceso de cambio cultural profundo que las lleve a adherir a ese concepto, sin pretender mantener un protagonismo impropio. La segunda es que varios actores políticos en países de la región siguen optando por usar a las FF.AA. para sus fines, incluso cuando ejercen el gobierno al cual han accedido democráticamente, otorgándoles a las instituciones militares un rol político en beneficio de su ideario. La tercera es que algunos gobernantes asumen que la subordinación militar se logra manteniendo a los miembros de ese sector aislados de la sociedad, negándoles una participación propia de su función, aplicándoles el concepto de reducirlos a ser meros espectadores de procesos, en circunstancias de que su aporte es necesario si se canaliza en la forma que las democracias en forma lo consideran.
Para mantenernos alejados de golpes y asonadas militares se requiere reforzar y ampliar las cláusulas democráticas, logrando voluntad política para aplicarlas. A ello debería unirse una tarea de educación a nivel político y militar de las características que FF.AA. y policiales deberían tener en democracia.
Para que no vuelvan a repetirse estos hechos en la región, es exigible a la clase política comportarse como verdaderos ejemplos en el ejercicio del poder. Políticos y militares deberían asumir el cambio cultural de FF.AA. modernas actuando en un contexto democrático. Ese modelo no deja espacios para un protagonismo militar impropio ni tampoco la tentación política de llevar a las FF.AA. a un aislacionismo o reduccionismo que niegue su aporte a la sociedad, concordante con el verdadero fin de la función militar.

Posteado por:
Raul Munizaga N
15/10/2010 12:03
[ N° 23 ] Futuros golpes militares exitosos son inevitables.
La democracia lleva consigo el germen de su destrucción.
No es sustentable con una población con educación asertiva.
Que no acepte ser engañada continuamente y cada vez mas restringida en su libertad con la excusa de la protección.
A las generaciones futuras les parecerá increíble lo ridículo del manejo del poder actual.
Los autores de ciencia ficción no son capaces de imaginarse un sistema democrático en el futuro y el cambio del poder pasara inevitablemente por golpes