Escalona enrostra a Altamirano su rol en el fracaso del gobierno de Allende

Alejandro Trujillo
El Mercurio

A primera hora de hoy, el senador PS Camilo Escalona tenía previsto subir a su página web un especial documento que venía trabajando hace varios días.

Se trata de una carta abierta, de seis carillas de extensión, que el ex presidente socialista redactó en respuesta a la tesis sobre la situación de la colectividad levantada por el ex secretario general, Carlos Altamirano, en su libro de memorias publicado recientemente.

En la publicación que el emblemático dirigente de la UP presentó el 10 de diciembre pasado, junto al historiador Gabriel Salazar, se hace un crítico análisis respecto del proceso de transformación vivido por el PS desde el regreso a la democracia hasta la fecha.

La tesis de Altamirano, quien describe a Escalona como su "enemigo natural", es que, a partir de su participación dentro de la Concertación, la colectividad ha "perdido su identidad histórica", transformándose en "un partido neoliberal más".

Pese a las alusiones y a los cuestionamientos en su contra incluidos en el libro, Escalona había optado hasta ahora por evitar comentarios o confrontaciones. La idea, afirman en su entorno, era preparar una respuesta acabada a cada uno de los juicios de Altamirano, luego de una lectura exhaustiva de sus memorias.

Con formato de una carta pública, el documento redactado por Escalona -al cual tuvo acceso ayer "El Mercurio"- acusa al ex secretario general socialista de haber actuado durante toda su carrera política con "desprecio a lo popular", cuestionando en duros términos su rol en el fracaso del proyecto de Salvador Allende.

La argumentación que recorre el texto es que Altamirano nunca tomó en cuenta el pensamiento de los ciudadanos, en especial en lo referido a la relación del partido con el mundo popular, lo que habría influido en el devenir de los acontecimientos de 1973. "En el fondo, su visceralidad es la manifestación de un profundo desprecio por lo popular", dice.

"Carlos Altamirano desprecia a la sociedad chilena, transpira un resentimiento sordo ante un país que no toma nota de sus furibundos ataques a todo lo existente. Se trata de una persona que en su retiro quisiese que el curso de los acontecimientos golpeara a su puerta, pero que como ello no sucede, cae en una desesperación iracunda, anatemizando como "neoliberal" todo aquello que no concurre a su llamado cerril", señala en uno de sus párrafos el texto del senador socialista.

De hecho, Escalona apunta a las críticas que el ex secretario general del PS hace a figuras como Lula, Evo Morales y Hugo Chávez, para plantear que éste no entiende los procesos de transformación del socialismo que existen en la actualidad.

Pero además, el senador cuestiona directamente el rol de Altamirano en el gobierno de Allende. "De la experiencia de la Unidad Popular queda claro que no creía en ella, reconoce que no tenía ni plan ni estrategia para orientarse en lo que él mismo denomina como la mayor encrucijada de la historia de Chile. Triste reconocimiento (...) Empujar un proceso sin saber cómo dirigirlo confirma su plena irresponsabilidad política", añade en su documento.

Según plantea Escalona, los intentos de la cúpula del PS -encabezada por Altamirano- de "jugar al todo o nada" con la tesis de imponer "el socialismo cueste lo que cueste" terminaron siendo decisivos para el golpe militar de 1973, y todo lo que sobrevino en los años siguientes.

"Altamirano se equivocó rotundamente, salvar la democracia era posible, para ello se necesitaba actuar coherentemente con la realidad chilena, con su institucionalidad, configuración social y partidaria que habían llevado a Salvador Allende al triunfo electoral", señala.

Respecto a la forma en que el ex secretario general caracteriza a Allende (a quien en una parte describe como un hombre con gran liderazgo pero que intentaba "escapar" de las dificultades), Escalona señala: "Allende asumió lo suyo. No se rindió ni entregó. Otros cayeron en la clandestinidad. Otros siguen dando explicaciones".

El parlamentario concluye sus reflexiones calificando a Altamirano como una persona más preocupada por "eludir sus responsabilidades" y reforzar su "soberbia intelectual" que de hacer un análisis objetivo de la historia.

Citas claves

"Carlos Altamirano desprecia a la sociedad chilena, transpira un resentimiento sordo ante un país que no toma nota de sus furibundos ataques a todo lo existente".
"Quienes lean el libro encontrarán la exhibición de una egolatría profunda (...) y el irreprimible esfuerzo por descargar en terceras personas las propias responsabilidades".

"Empujar un proceso (como la UP) sin saber cómo dirigirlo confirma su plena irresponsabilidad política".

"Altamirano se equivocó rotundamente, salvar la democracia era posible, para ello se necesitaba actuar coherentemente con la realidad chilena, con su institucionalidad, configuración social y partidaria que habían llevado a Salvador Allende al triunfo electoral".

"Se trata de una persona que en su retiro quisiese que el curso de los acontecimientos golpeara a su puerta, pero que como ello no sucede, cae en una desesperación iracunda, anatemizando como 'neoliberal' todo aquello que no concurre a su llamado cerril".