viernes, 16 de noviembre de 2012

SENTIMIENTOS DE SOLDADO





DE CHILE INFORMA EDICIÓN 1.158

Escribe don Jean Paul Zimmermann M.
Oficial de Ejército ®

Cuando ingresé al Ejército hace 34 años atrás, en el frontis de
la Escuela Militar había un principio escrito en grandes letras
de bronce que rezaba:
“Para ser Oficial no se necesitan más pruebas de nobleza que
las verdaderas que forjan el valor, el merito y el patriotismo”
¿Será que esos principios que nos inculcaron siendo niños se
perdieron en el tiempo y hoy día cualquier pelafustán puede ser
Oficial, Suboficial, Clase o Soldado Profesional?
Partieron encarcelando a los héroes del 73, persecución
encarnizada hasta el día de hoy y a los que aún no les cae el
artero zarpazo rojo, nuestros sucesores los reciben por la
puerta de atrás de los cuarteles y ojalá bien entrada la noche
para que nadie los vea.
Seguimos con un nunca más, como si la culpa de haber tenido
que intervenir el país y devolverle su dignidad, hubiese sido
nuestra.
¿Quién se acuerda del sacrificio de nuestros soldados para
sacar adelante a nuestra Patria?
¿Quién se acuerda de nuestros muertos?
¿Le dimos nuestra vida a la Patria para qué?
¿Para que nuestros viejos se mueran en una cárcel de mala
muerte y no seamos capaces ni siquiera de ir a visitarlos?
¿Para que den de baja a un General Valiente que no quiere que
nuestro Ejército se llene de maricones?
¿Para que aparezca un político corrupto y cambie nuestro
escudo nacional por un cuadrado tricolor que no dice nada?
¿Para que sigamos en manos de un Mirista a cargo de
determinar las causas de muerte de la guerra del 73 a
sabiendas de que solo lo mueve el odio?
¿Para que un Presidente elegido con nuestros votos se de una
vuelta de carnero y en vez de cumplir su promesa con nosotros
sólo acreciente la persecución hacia los nuestros y mienta
carerraja?
¿Para tener un Ministro del Interior, hoy de Defensa, que debe
ser la vergüenza de la comunidad judía en Chile por lo inútil e
inepto?
¿Para que el ex Ministro Allamand, en su afán de ser
Presidente, sea capaz de entregar en bandeja a las FF.AA., a
sus detractores más encarnizados?
¿Para que aparezca en TV o en la prensa el abanderado de los
homosexuales que tiene más autoridad que el CJE, levante un
poco la voz y éste termine pidiendo perdón?
Hace algunos años atrás si alguien osaba siquiera faltarle el
respeto a uno de los nuestros, inmediatamente se hacía sentir
el malestar institucional y todos temblaban ¿hoy día qué?
Yo no tengo nada contra los invertidos, pero, ¿con qué
autoridad van a mandar?
¿Alguien se acuerda del Reglamento de Conducción Táctica o
del Reglamento de Disciplina que a cada uno de nosotros le
tocó comentar en la lectura de la orden de nuestras
compañías?
¿Qué nos pasó?
¿Y encima encontramos poco a nuestros vecinos? ¿Con qué
ropa?
Por Dios, qué suerte tuvo mi General Pinochet para no ver esta
anarquía.
Falleció justo a tiempo.
Y la culpa es nuestra. Porque los dejamos hacer sin decir nada.
Y por si fuera poco, todavía hay termo céfalos que se oponen al
Plan Ahora y seguirán votando por esta cáfila de politólogos de
la Alianza que se enriquecieron con el gobierno de las FF.AA. y
de Carabineros, pero cuando tienen que dar la cara para salir
en nuestra defensa se rinden ante una Vallejo, un mafioso
como Girardi, un asqueroso como Pizarro, Andrade o se
atemorizan ante un alcohólico como Gutiérrez o un
sinvergüenza como el hijo del payaso Chávez me refiero a
Navarro.
Por lo menos yo, cumpliré el Plan Ahora.
Qué vergüenza y pena siento hoy día.

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