miércoles, 22 de mayo de 2013

PLAN AHORA (Mensaje Presidencial)



PLAN AHORA INFORMA

RESPECTO A LA ÚLTIMA CUENTA PÚBLICA PRESIDENCIAL

¡CHILE TIENE UN PRESIDENTE QUE NO HA RESPETADO LA PALABRA!


Fue muy lamentable que tras su última cuenta pública, el señor Presidente Piñera no tuviera el valor de terminar su paso por la historia política chilena como un hombre de bien, como una persona de fiar, como un caballero.

Fue un largo discurso digno de un país donde absolutamente todo, marcha a la perfección.

No podemos dejar de reconocer sus éxitos económicos, eso sí lo sabe hacer con excelencia. Pero bien sabemos todos que: “no solo de pan vive el hombre”.

Hay muchas cosas que quedarán en la retina de los chilenos: Como esos aciagos días en que una irresponsable joven anárquica, tuvo a todos los chilenos en pie de guerra, y donde el señor Presidente no tuvo la hombría de proteger a la ciudadanía aplicando la ley como es debido.

Tampoco olvidaremos la famosa “puerta giratoria”, slogan muy nombrado en su campaña, pero que para dolor y angustia de los chilenos, nunca dejó de girar.

Y si de promesas incumplidas se trata, indudablemente destaca la que hizo cara a cara al mundo militar chileno, donde lo que ofreció fue muy simple y algo que por lo demás, es un deber constitucional: “Justicia igual para todos”.

Y éste es el punto central de esta nota:

En su última cuenta pública el Presidente simplemente escondió la cara a ese compromiso adquirido, y gracias al cual pudo llegar a La Moneda.

La votación de los uniformados y sus familias supera con creces la diferencia que obtuvo sobre su contendor en la elección presidencial del 2009, y esos votos sólo los tuvo porque ellos, tal vez ilusamente, creyeron que el señor Piñera era un hombre de palabra.

Lo que las Instituciones armadas de Chile esperaban de su Presidente, sólo era que el Estado de Derecho, que impera para todos los ciudadanos de este país, también llegue a ellos.

Los uniformados chilenos, y nos referimos a todos, pero fundamentalmente a los que se encuentran en condición de retiro, están en extremo, necesitados de eso que es fundamental para toda persona que vive en un país civilizado y provisto de democracia: JUSTICIA.

Y esa justicia es la que el señor Presidente les prometió en su campaña.

Pero esa “promesa” con el correr del tiempo, se gemelizó, con las “garantías constitucionales” de Allende: solo fueron una “medida táctica” para obtener el poder.

Lo de Allende ocurrió hace más de cuarenta años, esa mentira la podemos tildar jocosamente como algo muy típico de un hambriento marxista, y la culpa sólo fue de la nunca bien ponderada democracia cristiana, que para variar actuó con absoluta irresponsabilidad.

Pero la promesa -o mentira-, del actual Presidente, ocurrió ahora, en tiempos modernos; y engañó a las Instituciones mejor evaluadas y de mayor credibilidad ante la ciudadanía, las Fuerzas Armadas y Carabineros de Chile. Quienes por lo demás son los que dan sustento a nuestra República y a todas las Instituciones del Estado.

Esa mentira del Presidente Piñera, es típica de un “hombre de poca palabra”. Engañó cara a cara; se disfrazó de caballero para mentir a verdaderos caballeros. Prometió lo que nunca debe faltar: justicia, y a cambio de ella, entregó burla y desprecio.

El Presidente buscó la actual realidad:

¡Las Fuerzas Armadas y Carabineros de Chile, que siempre han estado, están y estarán integradas por personas de Honor, hoy lo indican con el dedo... justamente por su falta de Honor!

Le recordamos al Presidente que los uniformados y los ex uniformados, junto a sus familias, son ciudadanos de este país, y como tales tienen derechos.

Si él hubiera sabido cumplir con su palabra, se habría evitado esa gran vergüenza de las elecciones municipales 2012; la familia militar le advirtió al Presidente en repetidas ocasiones que se encontraba unida tras el “Plan Ahora”… y él se negó a escuchar.

El resultado fue de profundo dolor para la derecha, y con ese resultado el señor Presidente, recibió nuestro primer aviso.

Pero como tozudamente el Presidente, insiste en su sordera, el segundo aviso será en las elecciones primarias, donde el mundo militar chileno, unido nuevamente tras el Plan Ahora, sacará del camino a la presidencia, al amigo y candidato de Su Excelencia, don Andrés Allamand.

Esa medida es ineluctable, ya que ese señor es considerado por el mundo militar chileno, como el peor detractor de las Fuerzas Armadas y de Orden, y de la verdad histórica chilena.

Que lo de por hecho el Presidente, sin la disciplinada votación de la familia militar, el señor Allamand está perdiendo su tiempo. Que se acuerde Su Excelencia de nosotros el 30 de junio por la noche, cuando el señor Longueira se transforme en el candidato presidencial de la derecha.

Y que sepa también que ese día las cosas no terminan para él. El apoyo al señor Longueira en la elección presidencial por parte de la familia militar, no está definido, eso depende exclusivamente del Presidente.

Tendrá cinco meses -julio a noviembre- el señor Presidente… no para meditar, sino para actuar.

Le podemos asegurar a Su Excelencia: ni la concertación, ni la empresa nacional de los derechos humanos, ni la veintena de abogados marxistas pagados por el gobierno y que desde la Moneda persiguen a militares; votaron por él… pero esos perseguidos militares y sus familias, sí le dieron sus votos.

Le recomendamos al señor Presidente que salga de La Moneda con la frente el alto, eso no le hará mal, al contrario, lo dignificará.


DIRECTIVA NACIONAL DEL PLAN AHORA

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